La maldición de Hill House: la mansión está embrujada de verdad y es horripilante, según sus antiguos dueños
La maldición de Hill House ha hecho estragos con las mentes de los s de Netflix que han tenido el valor para verla. Una de las series más aterradoras de los últimos tiempos, basada en la novela de Shirley Jackson, que le quita el sueño hasta a los más valientes.
Pero a pesar de que sea una historia ficticia, la realidad es que la mansión en donde la serie fue rodada no está lejos de ser la protagonista de una película de horror. Según sus antiguos propietarios, la vieja casa tiene tantos fantasmas como la serie. Te contamos lo que esconde.
¿La mansión de La maldición de Hill House está embrujada?
Neil y Trish Liechty eran los antiguos dueños de la mansión en donde la serie de Netflix fue filmada, y en sus declaraciones a The Blast aseguran que el lugar está más embrujado que la historia de ficción. Así que toda esa sensación que probablemente sentiste cuando te enfrentaste a los fantasmas de la serie, es la misma que sus moradores cuando estaban allí.
De hecho, los actores seguro tengan varias historias que contar al respecto de los fantasmas reales que los acompañaron durante el rodaje de la temporada.
Bisham Manor, ubicada en Georgia, definitivamente no es un sitio que cualquiera vería y querría comprar de inmediato, pero los Liechty lo hicieron, en 2013. Según ellos, hay 4 o 5 fantasmas que habitan allí y que se dedican a crear eventos paranormales y atormentar a quienes los acompañen dentro de las paredes de la mansión.
A pesar de no haber ningún reproductor de música en el sótano, la familia reportó que en varias ocasiones se escuchaba música proveniente de allí. Otro de los acontecimientos extraños que se repetían eran los olores fuertes y desconocidos, muchas veces similares al humo de tabaco, cuando nadie en la casa fumaba.
No conformes con eso, los fantasmas comenzaron a tomar «prestadas» las pertenencias de la familia, e hicieron desaparecer el teléfono móvil de Neil, que posteriormente apareció unas semanas después en el mismo lugar donde lo había visto por última vez.
Los Liechty decidieron mudarse y vender la casa, pero los eventos paranormales los han acompañado a donde van. Parece que los fantasmas de Bisham Manor no quieren dejarlos ir tan fácilmente.
La mansión fue construida entre 1997 y 2002, y su propietario original decidió dejar una de las habitaciones de una construcción anterior en el lugar, intacta. La familia Liechty asegura que la mayor parte de la actividad paranormal se daba lugar justamente en esa habitación, por lo que probablemente estos fantasmas molestos estén en el lugar desde hace mucho, mucho tiempo.
Creo que no solamente los espectadores de La Maldición de Hill House sufren de insomnio luego de ver la serie, pues quienes entran a esa mansión probablemente tengan que sufrir las consecuencias también. ¿Te atreverías a visitarla?
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