Khoudia Diop presume el tono de su piel para una campaña que promueve la tolerancia

Aunque tratamos de ser más tolerantes en ciertos aspectos, en la actualidad, sigue existiendo el racismo. En el mundo de la moda dominan las modelos blancas. Sin embargo dos modelos de color Iman y Naomi Campbell hicieron historia en los noventa, pues se encontraban entre las más cotizadas. Esta última formó parte del talentoso grupo bautizado como las Top Models. Pero siguen siendo pocas las modelos de color que desfilan en las pasarelas más importantes. En el año 2013, Diversity Coalition, la organización que busca igualar las oportunidades entre razas, ya denunciaba que en la Semana de la Moda en Nueva York, un 82,7% de las modelos eran blancas, un 9,1% asiáticas, un 6% negras, un 2% latinas y un 0,3% de otras razas. En 30 desfiles no hubo ninguna modelo de otro color que no fuese blanco, destaca el sitio Trendencias. Y aunque las grandes marcas intentaron mejorar esta situación el año siguiente, las cifras no mejoraron mucho.
Pero aunque falte muchísimo por evolucionar en todos los ámbitos de la igualdad, Khoudia Diop, una modelo senegalesa, demostró que tener un color de piel oscuro, puede ser hermoso. A pesar de haber tenido muchísimos sobrenombres en su infancia por éste tono, hoy esta le ha traído frutos. No solo por el hecho de derribar el mito de que solo las que poseen piel blanca son lindas, sino porque su color de piel es algo que nunca se había visto en el mundo de la moda.
A través de la campaña ‘ The Colored girl Campaign’, un sitio que promueve la aceptación de todas las razas, Khoudia se hizo conocida por su especial tono de piel y por compartir muchas de las creencias de este sitio, en el que el gran lema es ser tolerantes y no discriminar por el color de las pieles. Lección que comparte también con todos sus seguidores a través de su cuenta en Instagram.
Khoudia se ha convertido en el perfecto ejemplo de que los colores de pieles oscuros pueden ser hermosos y no tienen por qué ser discriminados. Lo que nos recuerda la lucha que mantienen desde hace tiempo varios famosos, por dejar claro que el talento no depende del color de la piel.
Como ha sido el caso en el que varios intérpretes del mundo del cine, han alegado ya por dos años consecutivos que en los Oscar no hay suficientes nominados de raza negra, que los blancos los superan con creces. Cuando Halle Berry finalmente se convirtió en la primera mujer afroamericana en recibir el Oscar por su actuación en Monster’s Ball, la actriz rompió en llanto. Y la razón de su llanto no era por su flamante actuación en la película, sino por convertirse en un símbolo en la industria de Hollywood; significaba que ciertas paredes se estaban derrumbando y quizás el racismo estaba haciéndose a un lado.
Aunque en su momento Halle Berry y Denzel Washington hayan ganado un Oscar y se les haya unido en el 2014 Lupita Nyong’o aún hay mucho que hacer. Otras mujeres como Beyoncé –gran activista en esta materia- y Rihanna, han demostrado que su color de piel no las detendrá y que además han sabido usarlo a su favor.
Esperemos que la industria de la moda y el mundo entero siga aceptando todas las razas y que se acabe con el racismo de una vez por todas.