El Partido Colorado ganó las presidenciales en Paraguay, pero no le fue tan fácil como esperaba
ASUNCIÓN, Paraguay.- Abdo Benítez, "Marito", como se le conoce popularmente, será el sustituto de su compañero de partido Horacio Cartes en la presidencia de Paraguay, de acuerdo con los resultados presentados por el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE).
Sin embargo, su triunfo fue más ajustado de lo que presagiaban las encuestas y Abdo, del gobernante Partido Colorado y que llegó como favorito a los comicios, le sacó una ventaja de menos del 4% (unos 100,000 votos) a su rival Efraín Alegre, de la alianza opositora GANAR, con un 98 % por ciento de las mesas escrutadas por el TSJE.
El vencedor es hijo del secretario privado del dictador Alfredo Stroessner (1954-1989), y derrotó en la interna colorada contra la candidatura de Cartes, quien aspiraba a la reelección.
El Tribunal Electoral calcula que la participación alcanzó 65% de los 4,2 millones de votantes, en una jornada que transcurrió con poco entusiasmo y sin incidentes. En estos comicios se elige también el nuevo Congreso y los gobernadores de los 17 departamentos.
El virtual ganador lideraba las encuestas con amplia ventaja sobre su principal rival, Efraín Alegre, de una coalición de centroizquierda del Partido Liberal y el Frente Guasú.
Oposición reforzada
La alianza “Ganar” perdió, pero fue por poco: Un margen del 5 por ciento que promete una legislatura con una oposición más consolidada para la economía más pequeña de América del Sur.
Como desde hace 70 años, el Partido Colorado volvió a ganar. Solo hubo una excepción, en el 2008, cuando una alianza de los mismos partidos logró desbancarlo y llevar al poder al Fernando Lugo, quien despúes sería destituido por el Congreso. No ocurrió esta vez, pese a que algunos dirigentes esperaban que se puediera dar una sorpresa similar.
Marito sustituirá a Horacio Cartes, un poderoso empresario multimillonario que se candidata ahora al Senado. Abdo se convierte en sel segundo presidente más joven de América del Sur. Con 46 años, el único más joven que él es el reciente ganador en Costa Rica.
"Me he ganado credenciales democráticas en mi trayectoria política", dijo en la mañana del domingo Abdo. El ganador de esta jornada electoral tenía 16 años cuando murió el dictador y no ha hecho expresa apología a la dictadura durante la campaña, como sí hacía en los últimos años desde su puesto en el Senado. Hasta esta mañana, cuando tras votar se dirigió al cementerio donde su padre está enterrado en un lujoso mausoleo que está justo pegado al que está dedicado a Stroessner.
Allí se hizo fotos con la prensa a la que convocó y salió sin hacer declaraciones. Antes, a las 6 de la mañana, había recibido a la prensa en su mansión de un barrio señorial de Asunción. Tomando mate conversó con periodistas y prometió un Gobierno que busque la reconciliación.
“Solo un milagro podría hacer que gane el del Partido Liberal y a Marito no se le puede acusar de estronista (que apoya a la dictadura) porque él solo era un niño cuando eso”, dijo a Univision Noticias Tito Ibarra , de 52 años, quien vende electrodomésticos usados en un pequeño local del centro de Asunción que también es su casa, la de su esposa y la de su loro. Sentado con el pájaro enjaulado a su lado en la puerta del negocio me dijo el sábado que “seguro va a ganar Marito”.
Jornada tranquila
Mientras tanto, Alegre coincidía la mañana del domingo votando en el mismo colegio con el expresidente Fernado Lugo. A quien en 2012, el mismo Alegre votó para destituir de la presidencia. Algo que ocurrió el 22 de juno de ese año, cuando Lugo fue sometido a un juicio político irregular. Ahora, aliados, comparten los flashes de las cámaras y la candidatura política.
Alegre tuvo ánimos para ser optimista hasta el último momento. Y previó que “la juventud está provocando un cambio”. Lugo tampoco se daba por vencido durante la tarde del domingo y dijo: "La vez anterior hicieron el mismo libreto, a las 17 hs se daban el triunfo y después ganó la Alianza". Pero la maquinaria del Partido Colorado volvió a demostrar el arrastre histórico y actual que tiene en todo el Paraguay.
En cualquier caso, la jornada electoral fue de las más tranquilas de la historia. Sin casi incidentes entre militantes de partidos y en un ambiente de resignación.
Amancio Cabañas lleva 38 años vendiendo diarios en la puerta de la sede principal del Partido Colorado (Asociación Nacional Republicana) en el centro de Asunción. Ha sido testigo de miles de reuniones, peleas y celebraciones coloradas. Vestido con un chaleco amarillo, a las 11am del pasado viernes ya había vendido todos sus periódicos, y estaba parado frente a la fachada roja de la sede, cobrando por cuidar autos. Mientras, dijo a Univision: “nunca un colorado votaría por un liberal. Los colorados siempre ganamos”.