Una pequeña de cinco años muere en un enfrentamiento entre el Ejército y hombres armados, familiares culpan a los militares
Heidi Mariana Pérez, una pequeña de cinco años, murió el pasado miércoles en el norte de México cuando viajaba con sus papás a bordo de un automóvil y supuestamente fueron confundidos en medio de un enfrentamiento entre el Ejército y un grupo criminal. Los padres acusan que la bala que mató a su hija fue disparada por los militares.
Este viernes, luego de varios reportes publicados por la prensa local, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, informó que se abrió una investigación para determinar el actuar de los militares que participaron en el enfrentamiento.
"En un enfrentamiento del Ejército con una organización del crimen organizado perdió la vida una niña, en Nuevo Laredo, y ya el secretario de la Defensa, el general Luis Cresencio Sandoval, ordenó de inmediato la investigación", informó el mandatario en su rueda de prensa diaria.
De acuerdo con los reportes de la prensa, la pequeña recibió un impacto de bala en la cabeza, en el municipio de Nuevo Laredo, fronterizo con Texas, cuando era llevada a un hospital del seguro social debido a un malestar estomacal.
Según los familiares, en un momento confuso supuestos militares de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) comenzaron a disparar en su contra mientras perseguían a presuntos criminales.
Aunque los familiares de la pequeña aseguran que las balas provinieron de los militares, el presidente López Obrador argumentó que aún se está investigando.
"Se va a esperar, ya nada más que ya se resuelva el día de hoy sobre la responsabilidad de quién disparó, si fue de parte del Ejército, porque se está incluso contribuyendo a la investigación", indicó el mandatario.
La muerte de la niña ocurre en medio del debate público de la militarización de la seguridad en México, donde el presidente López Obrador envió una reforma para trasladar al Ejército el control de la Guardia Nacional, un cuerpo de seguridad que él prometió mantener civil cuando lo creó en 2019.
El mandatario también ha anunciado que las Fuerzas Armadas seguirán en tareas de seguridad pública después de 2024, aunque él había prometido devolver los elementos a sus cuarteles.
López Obrador prometió que no habrá impunidad en el caso de la niña asesinada en Tamaulipas.
"Se va a castigar a los responsables y desde luego que les mando mi abrazo a los familiares de la niña, y decirles que no hay impunidad para nadie", comentó.
México registró 33,315 homicidios en 2021 después de los dos años más violentos de su historia, bajo el mandato de López Obrador, con 34,690 víctimas de asesinato en 2019 y 34,554 en 2020.
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