El exjefe de la Policía Nacional de Honduras es arrestado por tráfico de drogas

Tras dos años en la clandestinidad, el exjefe de la policía de Honduras, general Juan Carlos Bonilla Valladares, fue capturado por las autoridades de ese país, según confirmaron fuentes oficiales a Univision Noticias.
Se espera que el acusado de narcotráfico y asesinato sea pedido por extradición a Estados Unidos, donde fue nombrado como co-conspirador en una acusación de narcotráfico que también incluye al expresidente Juan Orlando Hernández.
Bonilla, de 62 años, también conocido como 'El Tigre', fue acusado en abril de 2020 por fiscales estadounidenses en Nueva York de abusar supuestamente de su posición oficial para proteger cargamentos de cocaína de varias toneladas en nombre de Hernández, y de su hermano Tony Hernández, un excongresista que fue condenado el año pasado por un juez federal estadounidense a cadena perpetua.
Bonilla fue detenido por la policía hondureña en un peaje de la carretera principal entre la capital, Tegucigalpa, y Comayagua, donde se encuentra el nuevo aeropuerto internacional.
Juan Orlando Hernández fue acusado el mes pasado de cargos de tráfico de drogas y armas y detenido en su casa en Tegucigalpa. Está a la espera de que el Tribunal Supremo decida la próxima semana si será extraditado a Estados Unidos.
Bonilla fue jefe de policía en el oeste de Honduras, zona clave para los narcos
Bonilla fue acusado en un tribunal federal de Nueva York de conspirar para traficar cocaína a Estados Unidos y de delitos de armas relacionados con el uso y la posesión de ametralladoras y dispositivos destructivos.
En caso de ser extraditado, Bonilla podría prestar un testimonio demoledor contra Hernández si decide cooperar con los fiscales.
Bonilla supuestamente "abusó de sus cargos en las fuerzas del orden hondureñas para burlar la ley y desempeñar un papel clave en una violenta conspiración internacional de narcotráfico", dijeron los fiscales. También "participó en actos de extrema violencia, incluido el asesinato de un traficante rival, para promover la conspiración", añadieron.
Univisión se reunió con Bonilla en Honduras varias veces en 2019 después de que fuera identificado como coconspirador en el caso Hernández y afirmó haber trabajado en estrecha colaboración con la DEA durante su tiempo como jefe de policía. Negó haber conspirado con los hermanos Hernández, o con cualquier otro narcotraficante.
Bonilla fue miembro de la Policía Nacional de Honduras entre aproximadamente 1985 y aproximadamente 2016. Durante su mandato, ocupó puestos de alto rango, incluyendo el de Jefe Regional de Policía en el oeste de Honduras, una zona estratégicamente importante para los narcotraficantes.
A cambio de los sobornos pagados con las ganancias de la droga, Bonilla "dirigió a los de la Policía Nacional de Honduras... para que dejaran pasar los cargamentos de cocaína por los puestos de control de la policía sin ser inspeccionados o incautados", dijeron los fiscales. También proporcionó supuestamente a los de la conspiración información delicada de las fuerzas del orden para facilitar los envíos de cocaína, incluida la información relativa a las operaciones de interdicción aérea y marítima.