Bolivia está inmersa en la incertidumbre por las elecciones presidenciales del domingo que han sacado a miles de ciudadanos a las calles a defender su voto y un proceso limpio. Con cerca del 97% de los votos escrutados, el presidente Evo Morales cuenta con un 46.49% de los apoyos frente al 37.01% del candidato opositor más votado, el expresidente Carlos Mesa (2003-2005). Crédito: Manuel Claure/Reuters
Un parón de casi 24 horas en el conteo rápido entre la noche del domingo y la del lunes y el hallazgo de material electoral no resguardado en diferentes puntos del país sembraron la duda en parte de la población de un posible fraude electoral. En la imagen, del 21 de octubre, un hombre levanta una de las papeletas de votación que fueron encontrada dentro de unas cajas cerca de un edificio en La Paz. Crédito: David Mercado/REUTERS
El domingo, cuando se paró el conteo preliminar del órgano electoral al 83% de los votos escrutados, Morales era el candidato más votado, pero parecía difícil que se produjera una remontada que le hiciera evitar una segunda vuelta. Sin embargo, 20 horas más tarde, cuando el recuento se reactivó mostró un dramático avance a favor del presidente que le situaba como virtual ganador en la primera vuelta, lo que despertó las sospechas de los opositores que salieron a las calles a protestar. Crédito: Aizar Raldes/AFP via Getty Images
El presidente Evo Morales se mostró convencido desde el primer momento en que el voto rural (que generalmente es el que más tarde se escruta por provenir de zonas más remotas) le daría la victoria en una primera vuelta. Este miércoles, en una conferencia de prensa en el palacio de gobierno, insistió en defender su victoria en la primera vuelta y dijo que las protestas forman parte de un intento de golpe de Estado en su contra. Crédito: Juan Karita/AP
Por su parte, el candidato opositor Carlos Mesa calificó de "fraude escandaloso" lo ocurrido con la difusión de los resultados y llamó a sus seguidores a defender el voto en las calles: “Confiamos en que la ciudadanía no va a aceptar esta votación, este resultado amañado”, aseguró.
Crédito: Juan Karita/AP
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Como Mesa, Morales también ha llamado a sus seguidores a "organizarse para defender la democracia". La movilización de partidarios de ambos candidatos en las calles ha provocado algunos choques. En la imagen, una línea de policías separa a manifestantes afines a ambos contendientes a las afueras del Tribunal Supremo Electoral. Crédito: Jorge Saenz/AP
En la noche del lunes, poco después de que se reactivara el conteo rápido y comenzaran las manifestaciones, la misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) cuestionó el giro en el recuento. En un comunicado, dijeron que el "cambio inexplicable de tendencia" modifica "drásticamente el destino de la elección y genera pérdida de confianza en el proceso electoral".
Crédito: Juan Karita/AP
Crédito: Juan Karita/AP
Los responsables de ese organismo, que se reunieron con Morales el martes, recomendaron este miércoles que haya segunda vuelta en Bolivia, aunque la diferencia entre el primer y segundo candidato supere el 10% (que es lo que estipula la ley boliviana para evitar una segunda vuelta en caso de que el candidato más votado supere el 40%). Crédito: Ueslei Marcelino/Reuters
"En el caso de que, concluido el cómputo, el margen de diferencia sea superior al 10%, estadísticamente es razonable concluir que será por un porcentaje ínfimo. Debido al contexto y las problemáticas evidenciadas en este proceso electoral, continuaría siendo una mejor opción convocar una segunda vuelta”, dijo el jefe de la misión de la OEA, el costarricense Manuel González. Crédito: Jorge Bernal/AFP via Getty Images
El lunes, en medio de manifestaciones en todo el país, la OEA también pidió a la población mantener la calma y abstenerse de la violencia para que los cómputos departamentales se desarrollaran "con normalidad y sin interrupciones y con garantías" para los observadores. Sin embargo, en los últimos días, los enfrentamientos entre manifestantes y agentes de la fuerza pública han sido comunes, como este sucedido en la ciudad oriental de Santa Cruz. Crédito: Rodrigo Urzagasti/Reuters
Durante las protestas, los manifestantes también han provocado incendios en varios tribunales departamentales. En la imagen, se pueden ver algunos destrozos en el Tribunal Electoral Departamental de Santa Cruz el 23 de octubre de 2019, después de las protestas por los resultados electorales. Crédito: Daniel Walker/AFP via Getty Images
Pese a que llegaba a los comicios con el logro de haber conseguido lo que se ha llamado el 'milagro económico' boliviano por el crecimiento sostenido de las finanzas y la reducción de la pobreza extrema, a Morales se le ha cuestionado por su apego al poder. Crédito: David Mercado/Reuters
En un referendo del 2016, el 51.3 % de la población vetó la modificación de la Constitución para su reelección. No obstante, el presidente se presentó a estos comicios gracias al polémico aval del Tribunal Constitucional que resolvió que los límites constitucionales no pueden estar por encima de los derechos políticos del mandatario establecidos en la Convención Americana de los Derechos Humanos. En la imagen, médicos y trabajadores de la salud protestan contra Evo Morales en La Paz el 22 de octubre. Crédito: Ueslei Marcelino/Reuters
Por eso, uno de los lemas que se han escuchado en los últimos días en las protestas es 'Bolivia dijo No', en referencia al rechazo de la población a reformar la Constitución para ampliar la reelección presidencial. En la imagen, partidarios de Mesa queman una bandera con una imagen de Morales. Crédito: David Mercado/Reuters
Independientemente de si se celebra una segunda vuelta o no, los resultados de estos comicios son los peores para el presidente en casi 14 años comparados con las tres votaciones previas en las que Morales consiguió un 53.7 % (2005), un 64.2 % (2009) y un 61.3% (2014). Crédito: Manuel Claure/Reuters
El mandatario, que llegó al poder desde los movimientos sociales y paradójicamente después de que Carlos Mesa renunciara a la presidencia en 2005 ante la presión de unas protestas encabezadas por el propio Morales, se enfrenta ahora a unas manifestaciones inéditas en la última década. Crédito: Juan Karita/AP