null: nullpx
Tortura

"Yo nunca he salido": revelan la llamada al 911 que salvó del cautiverio a los 13 hijos de la 'casa del horror'

Por primera vez se escucha la voz temorosa de la joven de 17 años que escapó de su vivienda en California y llamó a la Policía. Jordan Turpin reportó que ella y sus hermanos vivían secuestrados y eran torturados por sus propios padres, quienes serán sentenciados este viernes tras declararse culpables de todos los cargos en febrero pasado. Les espera una condena desde 25 años en prisión a cadena perpetua.
18 Abr 2019 – 06:52 PM EDT
Comparte
Cargando Video...

"Bueno, vivo en una familia de 15 personas y mis padres son abusivos. Ellos nos abusan y mis dos hermanitas están ahora encadenadas... Hay 13 niños y luego la madre y el padre", describió con voz temblorosa y con prisa Jordan Turpin, de 17 años y quien hablaba con una operadora del 911 el 14 de enero de 2018.

Gracias a que la joven escapó por una ventana y consiguió un celular, pudo hacer esa llamada que puso al descubierto el maltrato, aislamiento y cautiverio dentro de su hogar. Este jueves, un día antes de que David y Louise Turpin sean sentenciados por la tortura de sus hijos, por primera vez se escucha esa comunicación que salvó su propia vida y la de sus hermanos, revelada por la cadena ABC.

"Yo nunca he salido. No salgo mucho entonces no sé nada acerca de las calles ni nada", explicaba la adolescente cuando le pidieron detalles de su ubicación. Entonces la operadora empezó a hacerle preguntas más concretas.

—¿Y cuántos de tus hermanos están amarrados?
—Dos de mis hermanas, uno de mis hermanos.
—¿Cómo están amarrados? ¿Con una cuerda o con qué?
—Con cadenas. Ellos están encadenados a sus camas.

La conversación continuó mientras las autoridades iban en camino a la dirección de donde provenía la llamada. La operadora le preguta también a Jordan si cree que alguien necesitará ir al hospital y ella le responde que no está segura, pero le expresa que viven entre basura y que a veces se despierta y no puede respirar por lo sucia que está la casa.

Cuando la Policía entró a esa casa encontró que todo lo que la niña decía era cierto y aún había otros horrores por descubrir. Algunos de los hijos estaban, como ella había advertido, encadenados a las bases de sus camas y otros esposados. Todos estaban en pésimas condiciones de higiene.

Ese detalle también lo había revelado en la llamada al 911 la joven. Cuando la operadora le preguntó "¿cuándo fue la última vez que te bañaste?", ella contestó: "no sé, hace casi un año, pero a veces me siento tan sucia que me lavo la cara y el cabello".

La investigación del caso reveló que los castigos que los Turpin daban a sus hijos incluían "golpes frecuentemente" y hasta "estrangulamiento". Uno de los motivos por los que los castigaban era si los encontraban lavándose las manos más allá de la muñeca, los acusaban de estar "jugando con el agua" y los encadenaban.

Cuando los médicos examinaron a los 13 hijos de la familia Turpin todos parecían tener menos edad por el estado de desnutrición en el que se encontraban, además de que y estaban sucios.

—¿Alguien en la casa toma algún medicamento?
—Yo no sé qué es medicamento.
—¿Los educan en casa (o van a la escuela)?
—No, nosotros no vamos a la escuela. Nuestra madre les dice a las personas que somos educados en casa. Nuestra madre le dice a la gente que somos una escuela privada y ella tiene un montaje de una escuela privada falsa, pero realmente no vamos a la escuela. No he terminado el primer grado y tengo 17 (años).

Esas eran el tipo de respuestas que seguía recibiendo la persona que atendió la emergencia, en una llamada que fue el principio del final del matrimonio Turpin, quienes en febrero pasado se declararon culpables de 14 cargos graves, incluyendo tortura, abuso infantil, agresión y secuestro.

Los 13 hermanos Turpin, con edades desde los 2 hasta los 29 años, crecieron en un ambiente inimaginable: dormían todo el día y estaban despiertos en la noche. En cuatro dormitorios y tres baños de esa casa se vivieron horrores, contados por las propias víctimas al ser rescatadas. Los padres compraban comida para ellos y no la compartían.

No se les permitía tener juguetes. Sin embargo se encontraron muchos en la casa, pero en su empaque original y sin abrir. Pero esa no era la peor parte, sino los castigos a los que eran sometidos y por razones impensables.

Las autoridades creen que todos los hijos nacieron en hospitales, pero aseguran que ninguna de las víctimas había visto a un doctor en más de cinco años y ninguno había visto en su vida a un dentista.


Se espera que la pareja sea sentenciada a cumplir desde 25 años en prisión hasta cadena perpetua, haciéndolos elegibles para audiencias de solicitud de libertad condicional después de que cumplan el tiempo mínimo, según dijo Mike Hestrin, el fiscal de distrito del condado de Riverside luego de que ambos se declararon culpables en febrero.

"A excepción de que una junta de solicitud de libertad condicional decida que deben ser liberados, ellos pasarán el resto de su vida en prisión", advirtió Hestrin.

El fiscal aseguró que este caso está "entre los peores casos de abuso infantil que he visto jamás".

Loading
Cargando galería
Comparte
RELACIONADOS:Secuestro