Trump (sigue) en estado de negación: ignora al Colegio Electoral e insiste en que él ganó la elección
No ha sido suficiente que el Colegio Electoral ratificara este lunes la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones, ni las decenas de reveses judiciales en tribunales y hasta en la Corte Suprema en su intento de cambiar el resultado electoral o el número creciente de republicanos que -en secreto o en público- iten que en 2021 habrá un nuevo ocupante en la Oficina Oval.
El presidente saliente Donald Trump parece continuar en estado de negación y continúa aferrado a su narrativa infundada de que hubo fraude masivo, mostrando que no tiene intenciones de bajar la guardia. Después de la medianoche, publicó una cascada de tuits en los que repite las mismas afirmaciones engañosas o falsas sobre que la elección del 3 de noviembre estuvo supuestamente amañada y él es el vencedor.
"Muchos votos de Trump fueron enviados a Biden... Esta falsa elección ya no puede mantenerse. Muevan a los republicanos", dijo en un mensaje que Twitter etiquetó como tantos de sus otros tuits: "Esta afirmación sobre fraude electoral está cuestionada".
Un informe inexacto y engañoso
Desde el día de la elección hasta hoy, Trump ha estado promoviendo teorías de la conspiración y afirmaciones sin sustento sobre el supuesto fraude masivo, algo que ni el propio Departamento de Justicia liderado por un aliado de Trump, William Barr, ha dado crédito.
Dos semanas atrás, el presidente aseguró ante un grupo de periodistas que si el Colegio Electoral declaraba vencedor a Biden, él se iría de la Casa Blanca el 20 de enero.
Pero lejos de eso, Trump parece demeritar el veredicto electoral conocido este lunes, publicando múltiples tuits con la decisión de un juez de Michigan que acordó publicar un informe escrito por Russell Ramsland, un analista de seguridad cibernética y excandidato republicano al Congreso, en el que se alega falsamente que las máquinas de Dominion Voting Systems "voltearon" las boletas de Trump a Biden en el condado de Antrim.
"Esta es una gran noticia. Las máquinas de votación de Dominion son un desastre en todo el país. Cambiaron los resultados de una elección", tuiteó Trump con un enlace al informe.
Pero según The Washington Post, Ramsland previamente ha hecho declaraciones juradas inexactas en otros desafíos legales de Trump, incluyendo una con datos imprecisos de la votación y otra que "mezcló los distritos electorales de Michigan y Minnesota".
El asistente del fiscal general de Michigan, Erik Grill, declaró al Detroit Free-Press que el informe de Ramsland es "inexacto, incompleto y engañoso", que se basa en un pequeño condado donde Trump ganó por 3,800 votos, en un estado en que Biden se impuso por más de 150,000.
La declaración de Ramsland intentaba mostrar que los índices de participación en Michigan fueron inflados y las cifras no coinciden con la declaración oficial de los votos emitidos en todas las jurisdicciones menos una. Sin embargo, los datos oficiales muestran que el número de personas que emitieron un voto en las elecciones de noviembre no superó el número de votantes registrados en ninguna de las jurisdicciones.
Nueva estrategia: minimizar al Colegio Electoral
A pesar del llamado del presidente electo Biden a "pasar la página" y itir los resultados, Trump seguía en la Oficina Oval después del atardecer, llamando a aliados y a republicanos, de acuerdo con asesores de la Casa Blanca y de su campaña, citados por la agencia AP.
El presidente a menudo se escabullía al comedor privado junto a la Oficina Oval para ver televisión, quejándose de que las cadenas televisivas manejaban el tema del Colegio Electoral como una mininoche de elecciones, mientras que no daban tiempo al aire a sus impugnaciones, según el reporte.
La decepción de Trump venía creciendo por el tamaño limitado de los mítines “Stop the Steal” (Paren el robo) que se llevaron a cabo en todo el país, así como de las labores del Partido Republicano para colocar su propio cuerpo de electores en los estados.
Un deseo presidencial para una feroz defensa del gobierno provocó apariciones en televisión el lunes por la mañana de Stephen Miller, asesor de la Casa Blanca y uno de sus defensores más fervientes, para tratar de restar importancia a la votación del Colegio Electoral y sugerir que las impugnaciones jurídicas de Trump continuarían hasta el día que se espera que Biden tome posesión, el 20 de enero.