Al inicio del interrogatorio de la defensa, David Pecker confirmó que en la época del programa "Celebrity Apprentice", Trump era una de las principales celebridades que podía generar la mayor cantidad de ventas para el National Enquirer en ese momento.
"¿Entonces publicaste artículos sobre el presidente Trump porque era bueno para los negocios?", preguntó el abogado defensor Emil Bove. "Eso es correcto", confirmó Pecker.
Pecker confirmó durante el interrogatorio de la defensa que había estado advirtiendo a Trump sobre historias negativas durante unos 17 años antes de las elecciones.
Guiado por el abogado Emil Bove, Pecker habló de una relación de "beneficio mutuo" con Trump, en la que el expresidente le proporcionaba información sobre Celebrity Apprentice y él publicaba historias positivas sobre Trump.
David Pecker confirmó en la corte que había firmado un acuerdo de cooperación con la Fiscalía del Distrito de Manhattan durante la investigación que terminó con la acusación a Donald Trump por falsificación de registros comerciales a cambio de inmunidad.
El acuerdo, fechado 25 de octubre de 2019, fue mostrado a los del jurado.
Pecker dijo que, después de que Stormy Daniels habló de su supuesto encuentro sexual en el programa de Anderson Cooper, Trump lo llamó y le dijo que, dado el acuerdo de confidencialidad que firmó con Michael Cohen, Daniels le debía $24 millones.
Pecker dijo que conversó con Michael Cohen después de recibir una carta de la Comisión Federal Electoral en 2018.
"Cometimos una violación de campaña", recordó haber dicho Pecker, quien añadió que Cohen le contestó que no se preocupara.
"Jeff Sessions es el fiscal general y Donald Trump lo tiene metido en el bolsillo", dijo Cohen según el testimonio del testigo.
David Pecker dijo en la corte que el exeditor jefe del National Enquirer, Dylan Howard, pensó que la historia de la supuesta relación sexual de la actriz porno Stormy Daniels y Donald Trump era real.
Los fiscales mostraron al jurado textos en los que Howard explica a Pecker por qué creía en la veracidad de la historia de Daniels. "Lo ha negado en el pasado, pero esta historia es cierta", y añadió que Daniels tenía una oferta de Good Morning America y otro medio.
El juez Juan Merchán dijo considerará las cuatro nuevas violaciones de la orden mordaza impuesta al expresidente Donald Trump alegadas en la sesión de la mañana por la Fiscalía.
Merchán aún no ha tomado una decisión sobre las supuestas violaciones a la orden mordaza ni ha declarado a Trump en desacato a la corte. Tampoco ha indicado cuándo podría tomar una decisión.
Cuando el fiscal Joshua Steinglass preguntó a Pecker si Trump dijo algo que le hiciera pensar que estaba preocupado por su familia y no por la campaña, el testigo respondió: "Creo que fue por la campaña".
Pecker agregó que la familia de Trump nunca fue mencionada en las conversaciones relativas a las historias de McDougal y Daniels. "Supuse que la preocupación era la campaña", dijo.
David Pecker testificó que no estuvo involucrado en la compra de la historia de Stormy Daniels y que no conoció los detalles de la transacción entre Cohen y la actriz porno cuando ocurrieron.
Dijo que fue tiempo después cuando se enteró de que Cohen le había pagado a la Daniel con sus propios fondos. "Fue la primera vez que oí hablar de eso", dijo Pecker.
Pecker explicó desde el estrado que “no quería asociar al National Enquirer con una estrella porno'", ya que Walmart era su principal distribuidor.
Cuando el fiscal preguntó a Pecker por qué le había enviado la historia de Daniels a Michael Cohen, Pecker dijo que era "muy dañina".
"Si alguien iba a comprarla, pensé que Michael y Donald Trump deberían hacerlo", agregó el testigo.
David Pecker testificó que el exeditor en jefe del National Enquirer, Dylan Howard, le dijo en octubre de 2016 que Stormy Daniel estaba vendiendo una historia sobre un supuesto encuentro sexual con Donald Trump por $120,000. Pecker respondió que no podían hacer el pago.
En un mensaje de texto mostrado por el fiscal, Howard dijo más tarde a Pecker: "Hablé con MC. Todo arreglado. Estamos fuera. Sin huellas digitales. Hablamos luego cara a cara".
El presidente de la Corte Suprema, John Roberts, dio por finalizada la presentación de los argumentos del Departamento de Justicia y de los abogados de Donald Trump sobre si goza de inmunidad para ser procesado por su presunto papel en subvertir los reultados de las elecciones presidenciales de 2020.
Ahora el máximo tribunal del país se tomará un tiempo para decirdir y se desconoce cuántos días serán.
Hasta ahora el único proceso penal en marcha es el de Nueva York y también se cree que podría ser el único que termine antes de las elecciones de noviembre.
El caso de subversión electoral es clave, porque de los cuatro juicios penales que enfrenta Trump, este es el más grave y el que puede conllevar a más años de prisión.
Un fallo intermedio de la Corte Suprema entre que Trump no tiene inmunidad absoluta, pero sí ciertas protecciones, podría requerir varios meses de procedimientos en cortes inferiores antes de que el caso pueda llegar a juicio.
Eso muy probablemente determinará que no habrá un desenlace antes de los comicios, y que, si Trump gana, cierre el proceso en su contra adelantado por el Departamento de Justicia.
Dreeben argumentó que el sistema legal de EEUU necesita equilibrar el funcionamiento efectivo de la presidencia y la rendición de cuentas de un expresidente bajo el estado de derecho.
El abogado del Departamento de Justicia aseguró también que el sistema existente y lo hace "bastante bien", pero que necesita algunas reglas auxiliares.
Su afirmación fue seguida de una fuerte crítica a los abogados de Trumo que -asegura- tienen una "propuesta radical" que incluso protege a Trump de situaciones como dar un golpe de estado, porque como presidente se trata de un acto oficial.
La magistrada Amy Coney Barrett asintió, para luego agregar: "Estoy de acuerdo".
Después de que el jurado regresó a la sala de la corte, los fiscales reiniciaron el interrogatorio de David Pecker. El fiscal Joshua Steinglass preguntó: "¿Conoce a alguien llamada Stephanie Clifford?"
"Stormy Daniels era una actriz porno", respondió Pecker para luego añadir que nunca la conoció en persona.
Algo que se puede inferir de las intervenciones de los magistrados de la Corte Suprema de EEUU este jueves es que el expresidente Trump no goza de inmunidad absoluta para ser procesado por presuntos delitos penales ocurridos durante su gobierno.
Sin embargo, algunas opiniones de los jueces del Supremo también dan a entender que al menos tiene cierta inmunidad que lo protege, especialmente al diferenciar lo que son actos públicos y privados del exmandatario.
Por ello, observadores y expertos en derecho penal estadounidense temen que no haya una luz verde automática para que el proceso contra Trump por presuntamente intentar subvertir los resultados de las elecciones de 2020 se active inmediatamente.