Piden al gobernador de Texas que detenga la ley SB4 para que no entre en vigor en medio del desastre del Harvey
La principal organización de dreamers dijo el martes que le está pidiendo al gobernador de Texas, Greg Abbott, para que detenga la implementación de la ley antiinmigrante SB4 hasta que el estado se recupere de los graves daños que está causando el paso del huracán Harvey.
“Sería cruel” si entra en vigor en estos momentos, dijo a Univision Noticias Cristina Jiménez, directora ejecutiva de United We Dream (UWD). Texas se encuentra en emergencia. Miles de personas están afectadas por las inundaciones y el huracán volverá a azotar sus costas este martes, aumentando la gravedad de la crisis”.
UWD señala que Houston es la segunda ciudad de Estados Unidos donde más dreamers viven después de Los Angeles. “Hay 20,000 protegidos por DACA”, dijo Jiménez. “Implementar la ley SB4 sería inhumano. Y a esto se agrega la amenaza de la eliminación del programa DACA por parte del presidente Trump”, dijo la activista.
El huracán Harvey, que desde el fin de semana azota el sur de Texas, ha provocado una decena de muertes, más de 30,000 damnificados y cuantiosos daños materiales.
Houston es la ciudad más poblada de Estados Unidos y el área más afectada por las catastróficas inundaciones resultado del paso de Harvey. El huracán se regresó al Golfo de México y este martes ha vuelto a enfilar hacia el noroeste, amenazando con volver a convertirse en huracán.
Los meteorólogos del NHC alertan sobre lluvias torrenciales que continúan cayendo en el sur del estado y el suroeste de Louisiana, y llamó nuevamente a la población a que “no intente viajar a las zonas afectadas, permanezca en lugar seguro y evite conducir por carreteras inundadas”.
La ley SB4
La ley SB4 entrará en vigor este 1 de septiembre. La legislación otorga poderes extraordinarios a las policías locales para pedir papeles a los individuos que sean detenidos y exista sospecha razonable que se trata de inmigrantes indocumentados.
Activistas consultados por Univision Noticias temen que la implementación de la medida provoque detenciones, incluso de residentes legales permanentes y ciudadanos estadounidenses. “Las consecuencias serán devastadoras”, dice Jaime Barrón, un abogado de inmigración que ejerce en Dallas, Texas.
Si bien la SB4 permite que los policías pregunten el estatus migratorio de individuos detenidos por cualquier otra ley vigente en el estado, no hay garantías de que habrá distinción entre aquel que lleve una luz trasera de su automóvil quemada y otro que haya cometido un asesinato. Esa es la mayor preocupación para los expertos.
Los activistas aguardan que una demanda entablada por ciudades como El Cenizo, Austin y San Antonio logren detener la implementación de la polémica ley.
Mientras, las organizaciones proinmigramtes piden a la población indocumentada estar preparados para reunir evidencias sobre abusos, y poderlas utilizar en demandas basadas en discriminación racial.
“Los afectados también pueden invocar el derecho a guardar silencio y pedir un abogado”, indica Michael Oliva, presidente del distinguido centro William B. Bates de la Facultad de Derecho de la Universidad de Houston. “Pero la ley SB4 no observa los derechos de los detenidos y tampoco hace una diferencia entre un residente o un ciudadano”.
