Comienza el juicio contra soldado acusado de deserción
El exsoldado estadounidense Bowe Bergdahl, fue prisionero de los talibanes en Afganistán durante cinco años hasta ser intercambiado por cinco detenidos de Guantánamo, es acusado de deserción y comparecerá este martes ante una corte marcial de Estados Unidos.
El objetivo de la audiencia en la base de Fort Bragg, en Carolina del Norte (sureste) es determinar el marco en que se llevará a cabo el juicio.
Bowe Bergdahl, de 29 años, deberá escuchar los cargos en su contra y tendrá la oportunidad de declarase culpable o no culpable. También se puede reservar la decisión para más adelante durante el juicio.
El exsoldado, que corre el riesgo de ser sentenciado a cadena perpetua, enfrenta dos acusaciones: "deserción" y "mala conducta frente el enemigo poniendo en peligro la cadena de mando, un batallón o un lugar", según dijo el Ejército hace más de una semana, cuando se anunció que sería juzgado por una corte marcial.
Único soldado capturado por los rebeldes durante la guerra en Afganistán, Bergdahl fue detenido por de la red Haqqani, vinculada a los talibanes, después de haber sido reportado como desaparecido de su puesto en el este de Afganistán, cerca de la frontera con Pakistán en junio de 2009.
Este caso es extremadamente delicado para la istración de Barack Obama, acusado por los conservadores de haber pasado por alto al Congreso cuando procedió al intercambio de prisioneros y de haber hecho concesiones demasiado grandes a los talibanes para obtener la liberación del soldado, capturado en condiciones poco claras.
Se había abierto una investigación para determinar las circunstancias de su secuestro.
Algunos soldados que estaban con él afirmaron que Bergdahl abandonó su puesto voluntariamente y puso en peligro a los soldados que partieron en su búsqueda.
El militar, que ha pasado por un proceso de readaptación y una investigación interna sobre su excepcional historia, desapareció de su puesto avanzado en Afganistán el 30 de junio de 2009.
Bergdhal se encuentra ahora asignado a un puesto de oficina en una base militar de San Antonio a la espera de la evolución del juicio.