Tras el anuncio del presidente Trump de sacar a EEUU del Acuerdo de País por considerarlo "un mal negocio", los críticos opinan que esta conferencia es un buen momento para observar cómo el resto del mundo planea mantenerse unido y mantener vivo el espíritu de lucha de París, a pesar de la negativa del gobierno estadounidense. Crédito: Getty Images
Una representante de Belice fotografía a un colega de Santa Lucía frente a una valla publicitaria iluminada que muestra a un isleño con una tortuga en Fiyi. En esta cumbre, las delegaciones de las islas tienen la aspiración de obtener más apoyo para enfrentarse al embate del cambio climático. Crédito: Getty Images
La segunda cumbre del clima celebrada tras el histórico Acuerdo de París, alcanzado en la capital sa en 2015, es presidida por uno de los países más vulnerables al calentamiento, Fiyi, que tras recibir el visto bueno de la ONU para albergar la COP23 vio que ninguna de sus islas disponía de capacidad para albergar los más de 20,000 participantes que vienen acudiendo a estas reuniones. Crédito: Getty Images
"Ya no podemos darnos el lujo de esperar, debemos actuar ahora (...) Si no estamos a la altura del reto, fracasaremos. Todos estamos en el mismo barco", aseguró en la inauguración del evento la diplomática mexicana Patricia Espinosa, secretaria ejecutiva de la Convención de la ONU sobre Cambio Climático (UNFCCC). Crédito: Getty Images