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Niños atrapados en la cueva en Tailandia comienzan curso intensivo de buceo y natación

Tras confirmar el buen estado de salud de los 12 chicos y su entrenador, los expertos han comenzado a impartir el entrenamiento con el fin de poder sacarlos lo antes posible. "Los 13 no tienen que salir al mismo tiempo. Quien esté listo primero puede ir primero", explicó el gobernador de la región donde está la gruta.
4 Jul 2018 – 03:28 AM EDT
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Expertos que participaron en la operación para localizar a 12 colegiales del equipo de fútbol y su entrenador de 25 años, atrapados en una cueva del norte de Tailandia, comenzaron a impartirles este miércoles cursos intensivos de natación y buceo, con el propósito de poner fin a una angustiosa experiencia de 11 días de encierro, una tarea que las autoridades afirman, no será nada fácil.

Buceadores, médicos, consejeros y fuerzas especiales de la Marina tailandesa estuvieron con los chicos a quienes que proporcionaron medicinas y alimentos, mientras los expertos evalúan las condiciones para sacarlos.

"Ahora estamos enseñando a los niños a nadar y bucear", dijo el viceprimer ministro tailandés, Prawit Wongsuwan, agregando que si los niveles de agua caen y la corriente se debilita, podrían ser evacuados de forma rápida.

El comienzo de los entrenamientos confirma el buen estado de salud, en general, de los chicos, e hizo augurar una evacuación rápida.


Los reportes iniciales según los que los chicos podrían quedar encerrados en la gruta hasta cuatro meses fueron rechazados como especulaciones por funcionarios. Sin embargo, se han preparado suministros para ese período de tiempo.

Las autoridades quieren sacar a los niños lo antes posible, pero no lo harán si no es seguro.

"Los 13 no tienen que salir al mismo tiempo. Quien esté listo primero puede ir primero", explicó el gobernador de la región de Chiang Rai, Narongsak Osottanakorn. "Si hay riesgos, entonces no los vamos a extraer".

El objetivo ahora es monitorear los niveles de agua, los pronósticos de lluvia y los procedimientos de extracción. A última hora del martes, unos 120 millones de litros de agua habían sido bombeados fuera de la cueva.

"El agua (dentro de la gruta) es muy fuerte y el espacio es estrecho. La extracción de los niños requiere mucha gente", según advirtió el viceprimer ministro Prawit a los periodistas.

La operación de evacuación será delicada y los socorristas advirtieron que no se precipitarían a la hora de realizarla, pues el camino de vuelta recorre varios trechos por zonas angostas y etapas difíciles bajo el agua.

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"¿Qué día es?": Lo primero que preguntaron los niños atrapados en una cueva de Tailandia

“Wai”, nombre y mensaje

Los doce niños y su entrenador de fútbol fueron hallados este lunes por las fuerzas especiales y dos expertos británicos en buceo en cuevas, después de haber estado incomunicados y en la oscuridad desde el 23 de junio, cuando una salida grupal a las cuevas acabó en un difícil operativo esfuerzo de búsqueda y rescate.

En el primer video en el que aparecían tras ser encontrados, publicado el lunes por la noche, se les veía demacrados pero dando las "gracias" a los buzos británicos, los primeros hombres que vieron en nueve días.

Según la Marina tailandesa, que publicó el miércoles un nuevo video de ellos, todos están "en buena salud". "Tras haber comido, todos fueron examinados por un médico militar", precisó la Marina.

En la grabación aparecen dos rescatistas en trajes de neopreno sentados en una parte elevada de la cueva junto a los niños envueltos en mantas de aluminio de emergencia. Parecían estar de buen humor, riéndose ocasionalmente.

Un foco apunta a cada niño, que saluda uno por uno y se presenta con la cabeza inclinada y las manos juntas en un tradicional saludo tailandés "wai", dice su nombre y luego: "estoy bien de salud". La Marina no explicó porqué el duodécimo niño no grabó el mensaje ni tampoco el entrenador.

Los esfuerzos para abrir una línea de comunicaciones con los chicos, ubicados a 2.5 millas (4 kilómetros) de la boca de la cueva, sufrieron un revés luego de que el equipo cayó al agua, dijo el miércoles el gobernador Narongsak.

"Estoy tan feliz", reaccionó, llorando, la madre de uno de los chicos, Bew, al ver el video, proyectado por los socorristas en una pantalla bajo una tienda, no muy lejos de la entrada de la cueva, donde las familias esperan que sus hijos sean evacuados.

"Está delgado", señaló no obstante, tras ver el mensaje de su hijo.

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