Los tentáculos del Cartel de Jalisco en Puerto Vallarta: ahora los negocios le piden permiso para abrir, según EEUU

El sector empresarial de Puerto Vallarta, uno de los destinos turísticos más visitados de México, está al parecer bajo el control del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), advierte el gobierno de Estados Unidos.

Es tal el poder de ese grupo criminal que ahora la mayoría de los nuevos establecimientos que abren en ese lugar tienen que pedirle autorización y aceptan entregarle una parte de sus ganancias. Es lo que se conoce como “cobro de piso”, un esquema de extorsión que el CJNG también aplica en la Riviera Maya.

Así lo afirma el Departamento del Tesoro al colocar en su lista negra a uno de los operadores del cartel en dicha ciudad. Se trata de Sergio Armando Orozco Rodríguez, de 55 años y alias ‘Chocho’.

“Este individuo actúa para o en nombre del Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) al facilitar varias actividades ilícitas en Puerto Vallarta”, describe un comunicado.

A Orozco Rodríguez se le vincula con varios clubes nocturnos, bares y restaurantes en ese lugar turístico. Una de sus funciones es recaudar 'impuestos' de ese tipo de establecimientos, los que más generan ingresos en un sitio turístico. Lo hace usando el poderío armado del cartel.

“Muchas empresas nuevas allí deben recibir un permiso no oficial de Orozco Rodríguez para abrir”, alega el Departamento del Tesoro. “Una vez abiertos, Orozco Rodríguez recauda impuestos de estos negocios en nombre del CJNG”, agrega.

Este hombre también se encargaría de lavar las ganancias que el cartel obtiene de la venta de drogas.

“Individuos como Sergio Armando Orozco Rodríguez ayudan al CJNG a infiltrarse en la economía de Puerto Vallarta e intimidar a los negocios legítimos”, dijo el subsecretario de la oficina Antiterrorismo y de Inteligencia Financiera del Departamento del Tesoro, Brian E. Nelson, en el comunicado.

Puerto Vallarta se ha vuelto un punto estratégico de las operaciones del Cartel de Jalisco. Una prueba de que la zona está vigilada por sicarios fue el secuestro de cuatro turistas en julio de 2020. Llegaron en una caravana de 14 personas en vehículos todoterreno y cuatrimotos proveniente de Guanajuato. Todo indica que los confundieron con de un grupo rival, les cerraron el paso y les dispararon mientras huían en sus autos y a pie. Un empresario de León murió por ese ataque.

También en Puerto Vallarta ocurrió en 2016 un suceso relevante en la historia reciente del narcotráfico mexicano: el secuestro en el restaurante 'La Leche' de dos hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, cuando seguía controlando una facción del Cartel de Sinaloa desde una celda en una prisión en el centro de México.

Los herederos de Guzmán fueron liberados más tarde. Una versión señala que el jefe del CJNG, Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’, negoció de alguna manera con ‘El Chapo’ para dejar ir a sus hijos.

Los jefes de la plaza

Otro incidente en ese destino turístico vinculado al CJNG es el asesinato del exgobernador de Jalisco Aristóteles Sandoval en diciembre de 2020. Se encontraba comiendo en un restaurante cuando fue acribillado. La DEA alega que ese crimen fue organizado por Carlos Andrés Rivera Varela y Francisco Javier Gudiño Haro, quienes son los encargados de un grupo de sicarios que opera en Puerto Vallarta y que se caracteriza por usar armamento de alto calibre, como fusiles de francotirador.

Rivera Varela y Gudiño Haro también han sido señalados de orquestar el ataque contra el secretario de Seguridad Pública de la Ciudad de México, Omar García Harfuch, en junio de 2020. El funcionario resultó herido, pero murieron sus escoltas y una mujer que pasaba por el lugar, un barrio adinerado. Cuando se recuperaba de las lesiones en un hospital, ese jefe policial culpó al CJNG. En esa época, el cartel había puesto la mira en la capital mexicana, controlada por grupos criminales locales.

“El cartel utiliza este reconocido destino turístico como un bastión estratégico no solo para el narcotráfico, sino también para el lavado de dinero, la extorsión, los secuestros y los asesinatos”, dijo Nelson en el comunicado.

Rivera Varela nació en Colombia en 1986, pero reside en México desde hace muchos años. Le dicen ‘La Firma’. Mientras que Gudiño Haro, alias ‘La Gallina’, es originario de Jalisco y es dueño una empresa agrícola llamada ‘Costa Alegre’, cuya sede está en Puerto Vallarta. La compañía ahora es considerada un activo financiero del Cartel de Jalisco.

Ellos “han ayudado a orquestar asesinatos de rivales y políticos utilizando armas de alto poder”, indica el Departamento del Tesoro.

Ambos operan bajo las órdenes de Gonzalo Mendoza Gaytán, de 33 años y apodado ‘El Sapo’, quien es identificado como jefe de plaza del CJNG en Puerto Vallarta. La Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) lo fichó el 17 de mayo de 2019 tras catalogarlo como “responsable de importantes actos violentos” en esa región de México.

El Departamento del Tesoro afirma, además, que el agente de viajes Alejandro Chacón Miranda, de 36 años, tiene vínculos con Mendoza Gaytán. A este lo acusa de reservar viajes para y aliados del cartel, en los cuales transportaron droga y dinero ilícito. Su compañía se llama ‘Dale Tours’ y está en Guadalajara.

En 2018 se reveló que algunos policías municipales de Puerto Vallarta estaban en la nómina del CJNG. Se encargaban de realizar revisiones a vehículos y personas sospechosas de realizar actividades en contra del cartel, incluso de asesinar a dos elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) en esa ciudad.

La oficina del gobernador de Jalisco y el ayuntamiento de Puerto Vallarta no se han pronunciado hasta el momento sobre las actividades criminales que realiza el CJNG en ese sitio turístico.

Las operaciones en Manzanillo

A la fecha, la OFAC ha designado a varios narcos del Cartel de Jalisco, incluyendo a 'El Mencho', y su brazo financiero Los Cuinis, que lideran sus cuñados. Los negocios previamente fichados por el gobierno de Estados Unidos son centros comerciales, periódicos, empresas inmobiliarias, compañías agrícolas, un lujoso hotel boutique y hasta una promotora musical.

El Cartel de Jalisco, considerado por el gobierno estadounidense como la organización delictiva mejor armada de México, no ha dejado de ganar territorio en ese país. La DEA indica que durante la pandemia pactó con La Nueva Familia Michoacana para enfrentar a los gatilleros de 'Los Viagras'.

En el sur del país se alió con la organización criminal Guerreros Unidos, cuyo poder ha crecido porque controla el territorio mexicano que más cultiva goma de opio, de la cual se produce la heroína. También hizo acuerdos con el Cartel del Golfo para trabajar en Tamaulipas y Zacatecas, lo cual ha puesto en jaque la importación de heroína y cocaína por las zonas de McAllen y Brownsville, en Texas.

En los últimos años el CJNG se ha enfocado en la producción de fentanilo en cantidades industriales, que produce en laboratorios clandestinos. Los precursores químicos que usa para fabricar esta y otras drogas sintéticas los recibe en el puerto de Manzanillo, Colima, uno de sus principales activos.

Es el yerno de ‘El Mencho’, Julio Alberto Castillo Rodríguez, quien está al mando de cuatro del CJNG que coordinan las operaciones criminales en el puerto de Manzanillo, incluyendo la recepción de cargamentos de cocaína importada desde Colombia y de precursores químicos, según las autoridades estadounidenses.

Los cuatro traficantes que controlan el puerto de Manzanillo colaboran, además, con el jefe de plaza de Puerto Vallarta y con los dos jefes de sicarios en esa ciudad. “El éxito criminal de CJNG se debe en parte a su influencia en lugares estratégicos, como Manzanillo", dijo la directora de la OFAC, Andrea M. Gacki, en un comunicado.

“Este puerto de la costa del Pacífico sirve como una puerta de entrada importante para la cocaína colombiana y los precursores químicos importados de Asia, incluidos los que se utilizan para fabricar el fentanilo para su distribución final en Estados Unidos”, agregó la funcionaria.

Colima tiene una de las tasas criminales per cápita más altas de todo México y eso se atribuye al violento arribo del Cartel de Jalisco. Uno de tantos crímenes de alto impacto en esa zona ocurrió en junio de 2020, cuando sicarios del CJNG ejecutaron a tiros al juez federal Uriel Villegas Ortiz y a su esposa. Ese magistrado supervisó un caso relacionado con la extradición del hijo de ‘El Mencho’.

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