"No voy a declarar": 'El Chapo' rechaza testificar a su favor en su juicio por narcotráfico
El testimonio más esperado del juicio del siglo, el del propio Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, no se escuchará en una corte federal en Brooklyn, acelerando el inicio de las deliberaciones del jurado. Tan pronto como este viernes, los 12 del analizarían si el exjefe del cartel de Sinaloa debe pasar el resto de su vida en una prisión por 11 cargos de narcotráfico, lavado de dinero y armas.
Después de que la Fiscalía federal dio por concluida este lunes la presentación de agentes del orden que investigaron su imperio criminal, el juez Brian Cogan le preguntó al acusado sobre su intención de comparecer o no ante el tribunal.
Guzmán respondió que no usará ese derecho. “Señoría, yo y mis abogados hemos hablado de esto y me lo reservaré”, dijo Guzmán. Fue la primera vez que el jurado lo escucha hablar en persona.
“¿Se lo reserva?”, insistió el juez Cogan.
“Sí, no voy a declarar”, contestó ‘El Chapo’.
Para confirmar que esa decisión no se basaba solo en lo que le habían aconsejado sus abogados, el juez Cogan le inquirió nuevamente si estaba seguro. “Me aconsejaron al respecto y estoy de acuerdo con ellos”, respondió Guzmán.
Se espera que este miércoles la Fiscalía presente sus argumentos finales y que la defensa haga lo propio el jueves. Si esto se cumple, el jurado podría comenzar a deliberar el viernes. La pregunta ahora es cuánto tardarían para decidir si Guzmán era el jefe de una empresa criminal que amasó una fortuna importando múltiples toneladas de droga a Estados Unidos. Ese análisis podría durar varios días.
La incertidumbre sobre el testimonio de Guzmán se extendió hasta la tarde de este lunes. Su nombre aparecía al final de la lista de personas que podían comparecer a su favor. Su abogado principal, Eduardo Balarezo, informó el viernes que no daría a conocer previamente los nombres de “ningún testigo” ni si su cliente testificaría “hasta que llegue el tiempo de informar a la corte” tal decisión.
¿Culpable o inocente?
Hace unos días, un jurado le confesó al juez que un familiar le había comentado que leyó en el periódico New York Times un artículo que mencionaba la posibilidad de que ‘El Chapo’ se sentara en el estrado de los testigos. Pero Cogan decidió no excusarlo considerándolo un incidente menor y al confirmar que otros del no sabían nada sobre el contenido de tal publicación.
Los abogados del narcotraficante habían dado pocas pistas sobre cómo planeaban contrarrestar el testimonio de tres meses de más de 50 testigos del gobierno. Hasta la semana pasada aún debatían sobre si debían llamar a quienes ya habían acudido a la corte para tratar de socavar las pruebas de los fiscales y si el propio Guzmán debían hablar en su propia defensa.
Al final, optaron en presentar sus conclusiones como última herramienta.
La estrategia de la defensa se ha basado en alegar que Guzmán Ismael ‘El Mayo’ Zambada. También han tratado de mostrar que los gobiernos de México y EEUU crearon un “mito” en torno a ‘El Chapo’, volviéndolo un chivo expiatorio de su guerra contra las drogas.
Sobre los audios presentados por el FBI, los litigantes criticaron que no se confirmó de manera científica que se trataba de la voz real de su cliente. Además, han buscado restarles credibilidad a los relatos de los testigos alegando que se trata de criminales que, en un intento por reducir sus sentencias, han inflado las acusaciones contra su defendido.
“Son asesinos, ladrones, vendedores de droga”, dijo el abogado Jeffrey Lichtman en la presentación de los argumentos iniciales.
La Fiscalía, por su parte, ha hecho lo posible por quitarle a Guzmán la careta del “Robin Hood de la sierra”. A lo largo de más de tres meses, una larga lista de testigos lo han descrito como un asesino sanguinario, un manipulador, un negociador tenaz enfocado en la distribución a granel de droga y un corruptor capaz de escapar de las cárceles más seguras de México.