null: nullpx

El debate del año: Biden contra Sanders en Arizona

"Ahora los electores inscritos en ese partido y los estadounidenses en general tendrán la primera oportunidad de verlos solos cara a cara en un escenario durante el debate que el próximo domingo transmitirán Univision en español y CNN en inglés desde Phoenix, Arizona".
Opinión
Miembro de la unidad política de Univision Noticias
2020-03-09T12:11:42-04:00
Comparte
Default image alt
Former Vice President Joe Biden gestures towards top rival Senator Bernie Sanders as he speaks during the 2020 Democratic U.S. presidential debate in Houston, Texas, U.S., September 12, 2019. REUTERS/Mike Blake Crédito: MIKE BLAKE/REUTERS

Las elecciones primarias en una veintena de estados han despejado el horizonte político para los votantes demócratas, quienes han quedado con dos alternativas claras y bastante disímiles entre sí: el exvicepresidente Joe Biden y el senador Bernie Sanders, quienes llevan una cantidad combinada de 117 años en la política.

Los dos se iniciaron como activistas comunitarios en 1972 y 1971, respectivamente. Y desde entonces no han cesado de demostrar una vocación cívica no exenta de acciones y expresiones controversiales, como era de esperarse en políticos con semejante trayectoria y bagaje en un país complejo en el que todo, por fortuna, aún está a discusión pública.

Biden representa el ala centrista y Sanders el izquierdista del actual Partido Demócrata, aunque la verdad es que el senador de Vermont se baja y sube al carro partidista según sus aspiraciones electorales. En la práctica, es uno de dos senadores independientes – el otro es Angus King, de Maine – que a menudo, aunque no siempre, votan en sintonía con sus colegas demócratas.

Ahora los electores inscritos en ese partido y los estadounidenses en general tendrán la primera oportunidad de verlos solos cara a cara en un escenario durante el debate que el próximo domingo transmitirán Univision en español y CNN en inglés desde Phoenix, Arizona.

Será el debate del año. Como ningún otro ofrecerá la posibilidad más clara hasta ahora de entender cuál de los dos precandidatos demócratas es mejor, es decir, cuál hace un diagnóstico más certero y realista de los retos y problemas que enfrenta el país y también cuál de los dos plantea los remedios blandos, las soluciones más viables.

El senador Sanders está obligado a explicar qué significaría en la vida cotidiana de los estadounidenses el socialismo democrático que preconiza; que su socialismo, en efecto, no tiene que ver con las dictaduras totalitarias que lo embelesaron en su juventud; y que para noviembre puede aglutinar a los votantes del Partido Demócrata, incluyendo a esa mayoría moderada que apoyó a su rival Biden en 10 de 14 estados durante el pasado Supermartes.

El exvicepresidente Biden a su vez está obligado a demostrar que aprendió de los errores de la era del presidente Obama, tales como las deportaciones masivas de inmigrantes indocumentados, ciertas ingenuidades peligrosas en política exterior y el contubernio con las dictaduras de Cuba y Venezuela. También deberá probar que puede inspirar a los millones de jóvenes demócratas e independientes que favorecen a Sanders. Será indispensable para que pueda superar la maquinaria política y electoral que ha montado el presidente Trump en busca de su reelección.

Los dos aspirantes demócratas deberán asimismo convencer a millones de telespectadores y votantes de que son la mejor opción para ejercer el liderazgo que se requiere en tiempos de crisis, como la que en este momento confrontamos debido a la epidemia mundial de coronavirus que ya golpea a Estados Unidos. Quien aspire a gobernar este enrevesado país, debe estar bien dispuesto y preparado para responder a la infinidad de conflictos nacionales e internacionales que demandan su atención, rodeándose de asesores y tecnócratas capacitados que no se limiten a darle coba a su ego para trepar o conservar puestos de influencia y prestigio.

Arizona es un estado gobernado por republicanos que han explotado demagógicamente la inmigración legal e ilegal desde el vecino país de México para frenar el avance político y social de las minorías, especialmente de la hispana.

Engendró al monstruo antiinmigrante Joe Arpaio y a la incompetente exgobernadora Jan Brewer, entre otros abusadores de la comunidad hispana. Pero el Comité Nacional Demócrata lo seleccionó como sede para el debate del domingo porque lo considera un estado en disputa en noviembre. “Después de las históricas victorias en 2018”, dice Tom Pérez, presidente de ese comité, “estamos poniendo a los republicanos a la defensiva en el estado del Gran Cañón”. Algunos republicanos a su vez se esfuerzan por defender su hegemonía en el estado presentando candidatos moderados y evitando temas espinosos y divisivos.

A pesar del descalabro que sufrió en el Supermartes, Sanders cree que es el candidato que ofrece las ideas más audaces - revolucionarias las llama él - y la estrategia mejor para derrotar a Trump en la elección general.

Biden sostiene que él es el hombre porque encarna ideas moderadas que atraen a una mayor cantidad y variedad de votantes y que tienen mejores posibilidades de materializarse si le gana al presidente. Ambos dispondrán del escenario que necesitan para lucirse en Arizona. Nosotros seremos – o deberíamos ser – los espectadores atentos, los invitados especiales y los testigos excepcionales de un foro que probablemente definirá de una vez la contienda electoral demócrata.

Nota: La presente pieza fue seleccionada para publicación en nuestra sección de opinión como una contribución al debate público. La(s) visión(es) expresadas allí pertenecen exclusivamente a su(s) autor(es). Este contenido no representa la visión de Univision Noticias o la de su línea editorial.


Comparte
RELACIONADOS:Partido Demócrata