Las mujeres latinas merecen un salario digno y justo

Mi familia y mi fe me han hecho la persona que soy hoy. Me enseñaron a valorar el esfuerzo laboral y que siempre hay que hacer lo mejor por nuestra comunidad. Todo esto se lo debo a las mujeres fuertes de mi familia que nunca se dieron por vencidas, incluso en los tiempos difíciles. Esto no es único a mi familia; mujeres alrededor del país están trabajando dia y noche para proveer por sus familias y seres queridos. El dia de hoy hay un problema que todavía no se ha resuelto: la desigualdad de salarios. En donde la comunidad latina es la más afectada, porque la brecha entre lo que los hombres y las mujeres ganan es más amplia.
Estoy orgulloso del trabajo que han hecho mis colegas demócratas en la Cámara de Representantes para luchar por la igualdad salarial para nuestras hermanas, mamas y tias, porque como nuestra Líder Demócrata Nancy Pelosi siempre dice, “cuando las mujeres prosperan, América próspera”. La desigualdad salarial no es un problema que solo afecta a mujeres, es un problema que afecta a familias. El 40% de mujeres que forman parte de la fuerza laboral son las principales proveedoras de familia en los Estados Unidos, así que la igualdad salarial es importante y fundamental para incrementar la oportunidad económica para todos.
Asegurándonos que las mujeres latinas reciban el mismo salario equivalente al de sus colegas masculinos por el trabajo que hacen es una política inteligente y es un imperativo moral. Como el Papa Francisco dijo: “¿Por qué se da por descontado que las mujeres tienen que ganar menos que los hombres?”. Y eso es lo que deberíamos de preguntarnos. Vivimos en el país más rico del mundo, pero también estamos marginalizando a las mujeres cuando se trata de la igualdad de salarios. No hay que engañarnos, tenemos que estar orgullosos del progreso económico que hemos visto durante la istración del Presidente Obama, progreso que ha beneficiado a muchas mujeres, especialmente a latinas. Simplemente dicho, la igualdad de salarios es un derecho civil. Nadie en nuestro país merece ser tratado como un ciudadano de segunda clase.
No es imaginable que la mujeres latinas hoy ganan solamente 56 centavos por cada dólar que un hombre gana, haciéndolo el salario más bajo comparado con los 64 centavos que las mujeres afroamericanas ganan y los 78 centavos que las mujeres anglosajonas ganan. La desigualdad salarial no es un problema que le pertenece a los demócratas o a los republicanos: es un problema que nos afecta a todos. Desafortunadamente, confrontar la disparidad de sueldos no es una prioridad para los republicanos en el Congreso. De hecho, los republicanos en el Congreso votaron dos veces para bloquear la Ley de Igualdad Salarial el año pasado y siguen minimizando la importancia de una legislación de igualdad salarial. El Presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, a propuesto una agenda legislativa donde la igualdad salarial no es mencionada.
En el Día de la Igualdad Salarial, reconocemos que todavía nos falta mucho para alcanzar salarios dignos y justos. Cuando la familia necesita ayuda, la familia ayuda, y esto es lo que los republicanos deberían de estar haciendo: ayudar a nuestras familias. En este momento, millones de familias están pasando por momentos difíciles, pensado en cómo van a proveer por los suyos. Nuestras madres y hermanas trabajan duro y merecen justicia económica. Es tiempo de que congresistas republicanos actúen y se unan a los demócratas al eliminar la desigualdad salarial, porque eso se lo debemos a nuestras familias y comunidades.
Nota: La presente pieza fue seleccionada para publicación en nuestra sección de opinión como una contribución al debate público. La(s) visión(es) expresadas allí pertenecen exclusivamente a su(s) autor(es) y/o a la(s) organización(es) que representan. Este contenido no representa la visión de Univision Noticias o la de su línea editorial.