Adiós al NAFTA: entra en vigencia el nuevo pacto comercial entre EEUU, México y Canadá
Este 1 de julio entró en vigencia el nuevo tratado comercial entre México, EEUU y Canadá que sustituye al NAFTA, el pacto que desde 1994 había regido el intercambio entre los tres socios de América del Norte y cuya eliminación fue un empeño del presidente Donald Trump desde los tiempos de su primera campaña electoral.
Aunque el presidente Trump calificó el nuevo pacto, (bautizado en inglés USMCA por las iniciales de los países o T-MEC, en español) como “uno de los más importantes y mayores acuerdos comerciales en la historia de EEUU y del mundo”, los expertos consideran que se trató de una actualización del antiguo NAFTA que mantiene los fundamentos del acuerdo original.
Para marcar la ocasión, está previsto que la próxima semana el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, viaje a Washington en su primer viaje fuera del país. Una visita inusual, considerando la veda en viajes de todo tipo que ha impuesto el coronavirus en el mundo entero.
A casi dos años de la firma por parte de los mandatarios (en el caso mexicano el entonces presidente Enrique Peña Nieto) y tras la ratificación en los respectivos congresos, algunos aspectos del nuevo pacto todavía tienen que ser ajustados, como la ampliación de los derechos de los trabajadores mexicanos, que se ha topado con la lentitud del sistema legislativo de ese país y la oposición de algunos líderes empresariales y políticos.
La industria automotriz trata de entender a cabalidad algunos nuevos lineamientos, como los que fuerzan a incorporar más componentes norteamericanos en sus productos, algo que se complica más con la interrupción de las líneas de suministro generada por la pandemia del coronavirus.
Estos son algunos de los principales cambios que incorporó el USMCA, T-MEC, o como algunos lo han descrito, el NAFTA 2.0.