¿Se mete Trump en más aprietos cuando justifica la retención de documentos por la que lo imputaron en una corte federal de Miami?
Después escuchar los cargos en su contra en una corte federal de Miami y convertirse en el primer expresidente de Estados Unidos en ser acusado de crímenes federales esta semana, Donald Trump dio un discurso en el que no solo no negó las acusaciones de las que fue imputado, sino que, además, dijo que tenía el derecho y la autoridad para hacer lo que hizo.
La acusación contra Trump presentada por el fiscal especial Jack Smith consta de 37 cargos relacionados con el manejo impropio de documentos confidenciales de la Casa Blanca e incluyen 31 cargos por “retención voluntaria de información de seguridad nacional”, los cuales constituyen violaciones a la ley de espionaje y podrían acarrear un máximo de 10 años de prisión por cada cargo.
El documento también acusa a Trump de obstrucción de la justicia e incluye otros cargos relacionados con los esfuerzos del expresidente para ocultar y mentir a los investigadores sobre la posesión y el paradero de los documentos secretos.
¿Se incriminó Trump a sí mismo en su discurso de recolección de fondos después de la lectura de cargos?
Tras su salida de la corte federal de Miami y de una breve parada en un restaurante cubano de Miami, donde tomó café con algunos simpatizantes mientras otros oraban por él, Trump viajó a Nueva Jersey para participar en un acto de recolección de fondos en su club de golf en el poblado de Bedminster.
Al dirigirse a sus simpatizantes reunidos en el acto de recolección de fondos, en medio de insultos al presidente Joe Biden, a quien responsabilizó directamente de la acusación criminal en su contra, Trump dijo que “ cualquiera que sean los documentos que un presidente decida llevar consigo, tiene derecho a hacerlo. Es un derecho absoluto. Esta es la ley”.
Trump hacía referencia a la de ley de registros presidenciales, la cual, según El Detector de Mentiras de Univision, le da ese poder al presidente solo en lo relacionado con papeles personales, pero no con documentos y materiales creados o recibidos por un presidente en el curso de la conducción de sus deberes constitucionales.
Sin embargo, al invocar este poder, Trump busca dar justificación legal a los hechos contenidos en la acusación en su contra, en vez de desmentirlos, a pesar de que, según la ley de registros presidenciales, los mandatarios deben entregar todos los documentos no personales cuando dejan dejar el cargo.
El presidente de Estados Unidos no goza de poder absoluto en relación con registros oficiales
En el discurso del día de la lectura de cargos, Trump también trató de justificar la retención y traslado de los documentos confidenciales a su residencia en Florida al decir que “el presidente goza de autoridad ilimitada para tomar decisiones sobre la disposición de documentos".
Sin embargo, la ley de registros presidenciales establece restricciones a ese poder al no permitir que los presidentes dispongan de un registro presidencial sin el debido proceso, el cual incluye la opinión por escrito del archivista de Estados Unidos y una declaración de este de no tener la intención de tomar medidas en relación con dichos registros.
Ni Trump ni el archivista de Estados Unidos han dicho que se cumplió tal proceso, aunque en el pasado Trump dijo que tenía el poder de desclasificar los documentos con solo pensarlo. Sin embargo, la acusación cuenta con una grabación en la que Trump ite a una tercera persona sin autoridad para acceder a los documentos que los mismos no habían sido desclasificados.
En declaraciones a CBS News, Jason R. Baron, exdirector de litigios en la istración Nacional de Archivos y Registros de Estados Unidos, dijo que Trump "Simplemente se equivoca al decir que tenía el derecho absoluto de llevar consigo documentos oficiales cuando dejó el cargo".
Baron dijo además que Trump “ no tenía derecho a conservar ningún registro oficial sobre los asuntos de la Casa Blanca. Ni uno solo. Y una vez que fue notificado por los Archivos Nacionales, tenía el deber legal de devolver todos los registros presidenciales que retuvo en Mar-a-Lago, fueran clasificados o no".
Ni el presidente Biden ni el exvicepresidente Mike Pence serán acusados por haber retenido documentos clasificados. Ambos cooperaron con sus investigaciones respectivas y devolvieron inmediatamente todos los documentos que les fueron requeridos.
Trump tampoco fue imputado por los documentos que llevó a Mar-A-Lago, pero que devolvió después de la solicitud que le hizo la istración Nacional de Archivos y Registros de Estados Unidos, lo que da lugar a la pregunta de que si Trump hubiese devuelto todos los registros cuando se lo solicitaron los Archivos Nacionales ¿habría sido sujeto a esta acusación criminal?