“La humillación del siglo”, cómo Kevin McCarthy perdió el apoyo del ala radical republicana y ve peligrar la presidencia de la Cámara
La última vez que la Cámara de Representantes de Estados Unidos requirió más de una ronda de votos para elegir a su presidente fue durante la instalación del 68 Congreso en 1923. En aquella oportunidad, hicieron falta nueve rondas para finalmente elegir al republicano Frederick H. Gillett de Massachusetts.
Desde esa vez, la votación para escoger al líder, un procedimiento sin el cual no se puede llevar a cabo ninguna actividad legislativa, se había logrado en una sola ronda de votos.
Hasta este martes, cuando, después de tres intentos, Kevin McCarthy no pudo lograr el apoyo necesario para ser elegido.
fue nominado oficialmente por sus colegas a la presidencia de la Cámara a finales del año pasado, no pudo reunir el apoyo necesario para lograr los 218 votos requieridos si nadie vota "presente" (abstención).
Ha sido calificado como humillación de proporciones históricas para McCarthy, en un día que se suponía que sería meramente protocolar.
Los familiares y amigos de los nuevos representantes, que habían asistido al Capitolio para presenciar las juramentaciones de sus seres queridos, se quedaron con las ganas.
Después de la tercera ronda, cuando la disidencia aumentó de 19 a 20 votos, los representantes acordaron abruptamente, y contra los deseos de McCarthy, suspender la sesión hasta el miércoles al mediodía.
Minutos antes, McCarthy había dicho a los periodistas reunidos en el Capitolio: " Aquí nos quedamos hasta que ganemos", agregando que los números "cambiarán eventualmente".
Jamie Raskin, representante demócrata por Maryland y exmiembro del comité selecto de la Cámara de Representantes que investigó la toma del Capitolio, dijo a través de Twitter que McCarthy estaba cosechando las tempestades que había sembrado con el blanqueo de la insurrección del 6 de enero.
Y describió a la situación del líder republicano como “ la humillación del siglo”.
¿Por qué McCarthy no pudo ser elegido presidente de la Cámara el primer día de la votación?
La exigua mayoría con que los republicanos lograron el control de la Cámara de Representantes en las elecciones de mitad de término de 2022 (222-213), hace que un pequeño grupo ultraconservador radical agrupado en el Freedom Caucus tenga un poder desproporcionado, ya que sin sus votos la bancada republicana no puede sacar adelante ninguna votación.
Los del Freedom Caucus no han tenido tapujos en utilizar ese poder, exigiendo a McCarthy todo tipo de concesiones a cambio de sus votos, como membresías en los comités más importantes y una serie de nuevas reglas de la Cámara.
También hay algunos del Freedom Caucus que están radicalmente opuestos a la presidencia de McCarthy, y cuya oposición, de perseverar, podría dar al traste con las ambiciones del líder republicano.
¿Por qué el Freedom Caucus se opone a la presidencia de McCarthy?
Cuando los republicanos tomaron el control de la Cámara de Representantes en 2011, su presidente, John Boehner, de Ohio, designó a McCarthy como su látigo, que es como se conoce al miembro del liderazgo de un partido encargado de asegurarse de que sus voten por los proyectos de ley favorecidos por el presidente de la Cámara.
En 2015, McCarthy logró la aprobación de legislación impositiva y fiscal que era altamente impopular entre los del Freedom Caucus, y aunque él mismo finalmente votó contra la legislación, el ala radical republicana nunca se lo perdonó, tachándolo de oportunista.
Más recientemente, después de los sucesos del 6 de enero de 2021 en el Capitolio, McCarthy pronunció un discurso en el que responsabilizó directamente a Trump por la violencia en la sede del Congreso, e incluso dijo en privado que pensaba exigir su renuncia.
Aunque poco después McCarthy fue a sellar la paz con Trump en Mar-a-Lago, este giro del líder republicano reavivó las sospechas y antipatías del Freedom Caucus, el cual está completamente alineado con el proyecto político del expresidente.
Según Catie Edmonson, corresponsal en el Congreso del The New York Times, esta es una crisis creada por el propio McCarthy, quien al haber hecho todo tipo de contorsiones y dado concesiones ha creado una fracción parlamentaria republicana muy difícil de liderar, y que “no tiene ganas de ser liderada”.
El miércoles al mediodía, después de un periodo de cerca de 18 horas en las que tanto McCarthy y sus opositores republicanos habrán tenido tiempo de negociar y formar alianzas, sabremos si el aspirante a la presidencia de la Cámara podrá finalmente lograr su ansiada ambición o si la oposición del Freedom Caucus es de tal magnitud que McCarthy será conocido como el representante que sufrió la “humillación del siglo”.