null: nullpx
Univision Noticias
Política
    Donald Trump

    Cómo la crisis por los colombianos deportados permitió mostrar al mundo la doctrina Trump

    Unas 24 horas fueron suficientes para que la Casa Blanca dejara sentado cómo serán las cosas en las relaciones de Washington con resto del mundo: o aceptan las condiciones o aténganse a las consecuencias.
    Publicado 27 Ene 2025 – 12:14 PM EST | Actualizado 28 Ene 2025 – 04:33 AM EST
    Comparte
    Cargando Video...

    El presidente Donald Trump empezó su segunda semana en el poder vanagloriándose de la “victoria” que tuvo sobre el mandatario de Colombia, Gustavo Petro, tras su negativa de aceptar vuelos con deportados de EEUU salvo que fuera en condiciones “dignas”.

    La exigencia de Petro fue respondida con suspensión de visas, anuncio de aranceles del 25% y una promesa de que era solo el “comienzo” que asustó a muchos empresarios colombianos. Petro reaccionó anunciando aranceles similares a los productos estadounidenses.

    Pero, considerando que casi el 30% del comercio exterior colombiano se dirige a EEUU y que para Washington lo que importa y lo que exporta a ese país es una parte minúscula de su economía, según datos de la oficina del Representante Comercial de EEUU, era lo lógico que Colombia terminara cediendo, que es como lo presentan desde la Casa Blanca. En Bogotá dicen que negociaron para superar el ime.

    El 'gran garrote' funcionó en menos de 24 horas

    Sea como haya sido la solución, Trump se anotó un punto que le permitió mostrar al mundo cómo pueden ser las cosas si los demás países (incluyendo socios confiables, como Colombia) no aceptan las nuevas condiciones de Washington a las relaciones bilaterales, incluso si implican concesiones territoriales como ha asomado en los casos de Panamá y Dinamarca, por la isla de Groenlandia.

    Recuerda la política que a principios del siglo XX el presidente Teddy Roosevelt aplicó hacia América Latina y que los medios de la época bautizaron como el “gran garrote”, por una frase que repetía frecuentemente y que describía su estilo de hacer política desde tiempos de gobernador de Nueva York.

    “Hablar suave y llevar un gran garrote te llevará lejos”, era la frase completa inspirada, según él, en un proverbio africano.

    En este caso, la ‘doctrina Trump’, que es la de “EEUU primero”, se queda con el garrote y, en cambio, usa un discurso nada diplomático, como evidenció el intercambio de mensajes en la red X entre él y su colega colombiano.

    Colombia muestra lo que viene en la política exterior de Trump

    Si la guerra comercial se hubiera desatado, habría sido un golpe para la industria de las flores de Colombia, justo antes de la temporada del Día de San Valentín. El precio del café habría aumentado en los mercados por los aranceles que tendrían que pagar los importadores.

    De haber continuado, el presidente podría haber ordenado al Departamento del Tesoro tomar medidas para dificultarles a los colombianos el al sistema de pagos internacionales, basado en el dólar estadounidense.

    Para EEUU se habría presentado un problema si, como fuera de esperar, la cooperación en la lucha contra el narcotráfico se hubiera visto comprometida tras décadas de perfecto alineamiento entre las fuerzas de seguridad de ambas naciones.

    Nada de eso se produjo. Todo el episodio tuvo algo de teatral en ambas capitales, con Trump mostrándose “fuerte” ante sus seguidores y con un Petro algo poético con referencias a Bolívar y otros mitos nacionales para defender “sin miedo” el derecho de los países débiles.

    Pero igualmente dejó en el ambiente la sensación de cosas por venir cuando las políticas de Trump molesten a terceros, incluyendo aliados tradicionales, como Colombia o los socios de la OTAN a los que sorprendió la semana pasada exigiendo que destinen el 5% de su Producto Interno Bruto a la defensa (aunque el mismo EEUU solo invirtió en 2023 un 2.2%, según datos oficiales).

    Con seguridad, en muchas cancillerías tomaron nota. Como en Panamá, país cuyo canal Trump dice que deben devolverle a EEUU por supuestamente haber violado los acuerdos suscritos a fines de la década de 1970 entre el presidente Jimmy Carter y el general Omar Torrijos.

    Una "horrible" conversación sobre el futuro de Groenlandia

    O en Dinamarca, donde la primera ministra, Mette Frederiksen, tuvo una reunión con sus similares de países nórdicos para analizar “la gravedad de la situación", que en el caso danés es la presión para aumentar el presupuesto de defensa y la obsesión de Trump con asumir el control de Groenlandia, la gigantesca isla entre Europa y América que es territorio autónomo danés.

    "Frente a la nueva y más impredecible realidad que se avecina, las alianzas y amistades estrechas y buenas son cada vez más importantes", escribió Frederiksen en su cuenta de X mostrando una foto del encuentro en su casa con los líderes regionales.

    A mediados de enero, Frederiksen habría hablado por teléfono con Trump y según fuentes citadas por el Financial Times, los funcionarios daneses calificaron la conversación de "horrible", y una en la que el interés de Trump en Groenlandia fue visto como "serio y potencialmente muy peligroso".

    Trump, que no ha descartado una posible intervención militar para anexionarse la isla ártica, habría amenazado a Dinamarca con aranceles por este asunto.

    Para los daneses, como para los colombianos, EEUU es su principal mercado de exportación, por lo que una medida de ese tipo podría causar grave daño a su economía. Los desequilibrios parecen favorecer a Washington, al menos en ciertos casos.


    Comparte
    RELACIONADOS:Gustavo Petro