Matar sin querer: el imborrable trauma de los 'homicidas involuntarios' como Alec Baldwin

Matar a alguien sin intención, como eventos más traumáticos que alguien puede experimentar.

Algo que acaso sólo logran entender quienes han estado en sus zapatos y que, paralizados por la culpa y la vergüenza, muchas veces sufren en las sombras.

Sus casos son mucho más comunes de los que pueda pensarse.

Cada año, Halyna Hutchins, quien tenía 42 años.

“Cuando matamos a alguien, así sea accidentalmente, sentimos que ya no somos buenos”, explica a Univision Noticias el reverendo epicospal David Peters, quien vivió una situación similar a la del actor, pues a los 19 años estuvo involucrado en un accidente de tránsito donde murió una persona.

“El auto que conducía golpeó una cuneta y choqué con una motocicleta cuyo pasajero murió. Estuve en shock por lo que ocurrió, por lo que había hecho. No podía procesar nada. Mi pensamiento principal era que deseaba que me metieran preso para empezar a pagar por mis actos”, cuenta.

En la única declaración pública que ha hecho hasta el momento, Baldwin itió que “no hay palabras para transmitir” su “conmoción y tristeza por el trágico accidente que se llevó la vida de Halyna Hutchins”, y que su corazón está “roto por su esposo, su hijo y todos los que la conocieron y amaron”.

Traumatizados y desamparados

Casi no hay libros de autoayuda o grupos de apoyo para gente como Baldwin o el reverendo Peters. Tampoco hay una terminología apropiada que los categorice y mucho menos protocolos de tratamiento psicológico para atenderlos.

Más de 160,000 personas murieron de heridas prevenibles en 2018, de las cuales casi 40,000 fueron en accidentes de tránsito, según las estadísticas oficiales. Muchas de esas muertes son causadas involuntariamente por un tercero.

En función de esas y otras estadísticas se estima que al menos 30,000 personas en EEUU matan sin intención a alguien cada año en el país.

La cantidad de quienes cargan esa cruz podría aumentar.

Con la muerte de un pariente o amigo al que transmitieron el virus, advierte un estudio publicado en el Journal of Traumatic Stress Disorders & Treatment que califica los asesinatos no intencionales como un “trauma abandonado” que requiere mucha más investigación.

Su autora, la psicóloga social Maryann Gray, es la fundadora de Accidental Impacts (Impactos Accidentales), la única organización dedicada a ayudar a quienes han matado o herido involuntariamente a otra persona.

Ella también lo vivió en carne propia años atrás cuando un niño de 8 años se precipitó frente a su auto y no logró esquivarlo. Por eso, intuye lo que Baldwin está sintiendo.

“Es probable que las imágenes horribles del tiroteo y los momentos que le siguieron dominen su conciencia. Puede sentirse entumecido o desorientado, y luego volver a caer a la tierra en un mar de desesperación”, explica Gray en un artículo de opinión publicado en L.A Times.

Alec Baldwin está “devastado”

Los pocos estudios que se han hecho hasta la fecha indican que quienes, como Baldwin, matan a alguien sin querer tienen mayor riesgo de sufrir de Síndrome de Estrés Postraumático, Depresión Severa, Ansiedad generalizada, fobias y abuso de sustancias.

Resultados de los dos únicos estudios empíricos que se han hecho sobre estos pacientes identificaron que seguidamente del evento que causó la fatalidad, ocurre un período inicial de shock, seguido por emociones como dolor, culpa, rabia, depresión que no necesariamente se superan.

En las primeras imágenes del actor que se filtraron tras el accidente se le ve conmocionado, arqueado, en aparente lamento y hablando por teléfono.

Igual de afligido parece en las fotos del encuentro que sostuvo con el esposo y el hijo de Hutchins, la mujer que mató accidentalmente.

Fuentes allegadas a él han declarado a algunos medios que está “devastado”. Una contó a la revista People que estuvo “en estado de histeria y absolutamente inconsolable por horas”.

El daño moral de quien mata sin intención

“Creo que Baldwin tiene una conciencia, así que debe sentirse fatal”, comenta a Univision Noticias el reverendo David Peters, quien también es veterano de guerra.

Para él, “estamos lidiando con una situación de daño moral”, pues “la noción de que la gente buena no mata a nadie está arraigada en nuestros sistemas de valores”.

Sentir que no estuvimos a la altura de nuestros estándares morales, deja una cicatriz emocional muy fuerte que puede manifestarse mediante pensamientos suicidas, abuso de sustancias, anulación de cualquier emoción positiva y aislamiento, advierte la experta en el tema Maryann Gray.

“Así hagas todo bien, igual mataste a alguien”

Factores como la religión, ética y la forma en la que la familia propia hable de moralidad juegan un papel importante sobre cómo la persona procesa un homicidio involuntario.

“ Parte del sentimiento terrible después de un homicidio involuntario es que no hay nada que puedas hacer para cambiarlo. En un segundo, el mundo ha cambiado para siempre: ya no eres bueno. Así hagas cosas buenas de ahora en adelante, de todas formas, mataste a alguien. Hay una vergüenza interna y comunitaria en esto”, dice el reverendo Peters en conversación con Univision Noticias.

Advierte que el hecho de que Baldwin sea una figura pública, que además ha tenido un rol activo en el debate político y cultural estadounidense, hará que se convierta en el blanco de condenas y críticas, algo que ya es evidente en las redes sociales como Twitter donde la etiqueta #AlecForPrison fue tendencia en estos días.

El hijo del expresidente Donald Trump, Donald Trump Jr. aprovechó la tragedia que vive el actor, quien personificó una sátira del exmandatario en Saturday Night Live y es una reconocido liberal que ha expresado rechazo a la libre circulación de armas en EEUU, para burlarse de él promocionando unas camisetas que dicen: "Las armas no matan gente, Alec Baldwin mata gente".

Igual han hecho otros políticos o comentaristas conservadores.

“Pese a que cualquier código legal, desde el de Hammurabi o el de Moisés hasta el actual reconocen que hay una diferencia entre el homicidio, un accidente, el asesinato y premeditación, la mayoría de las personas no hace esa distinción”, explica Peters.

“Quieren sangre y la única que pueden ofrecer es la del asesino accidental”, agrega.

"Aunque se sienta solo, no está solo"

No hay una fórmula específica que ayude a sanar a quienes como el actor Alec Baldwin matan sin intención a alguien.

Buscar atención psicológica y comunicarse con otras que hayan pasado por algo similar mediante espacios como la organización Accidental Impacts puede aligerar la carga.

“Mi refugio es la comunidad de Impactos Accidentales, que se reúne mensualmente para escucharnos, compartir y consolarnos en este dolor tan único y vergonzoso como el del homicida accidental”, cuenta el reverendo Peters quien anhlea que Baldwin encuentre una comunidad así.

Más que superar, esta experiencia o eliminar la culpa, se habla de “reparación moral”, que consiste en reconocer el daño que se ha infringido y tratarse con autocompasión, así como de intentar honrar a las víctimas.

“No puedo pensar en una mejor forma para Baldwin y aquellos que han matado o herido sin intención a otros que honrar a sus víctimas al escoger vivir con valentía, con plena conciencia de la fragilidad de la vida”, recalca la psicóloga social Maryam Gray en su artículo de opinión.

“Aunque se sienta solo, no está solo. Puede recibir coraje y esperanza de miles de personas que han encontrado un camino de autoaceptación y respeto propio después de haber matado accidentalmente a alguien”, concluye.

Las personas que enfrenten una situación de este tipo o sus parientes pueden encontrar recursos e información útil en este enlace de la organización Accidental Impacts, que también tiene un grupo de Facebook.