¿Eres estilista? Estás expuesta a más químicos potencialmente tóxicos de los que crees
Ftalatos, parabenos, compuestos orgánicos volátiles (VOCs) forman parte de los productos de cabello usados por estilistas -especialmente hispanas y negras- en salones de belleza. Ahora una investigación revela que la lista no termina ahí: están expuestas a muchos otros compuestos desconocidos que ni siquiera figuran en las etiquetas, revela una nueva investigación.
Al analizar mediante una novedosa técnica las muestras de orina de 23 peluqueras hispanas y negras y compararlas con las de 17 mujeres de color que trabajaban en oficinas, científicos de la Universidad Johns Hopkins no sólo encontraron niveles más elevados de compuestos asociados a tratamientos del cabello, sino también muchos otros completamente desconocidos.
“Hay más exposiciones químicas en quienes ejercen este oficio de lo que esperamos", dice Matthew N. Newmeyer, becario postdoctoral en la Escuela de Salud Pública Johns Hopkins Bloomberg y autor principal del estudio publicado en el Journal of Exposure Science & Enviromental Epidemiology, que -esperan- sirva de punto de partida a otras investigaciones de mayor alcance.
“Definitivamente es preocupante. Con muchos de estos químicos ni siquiera sabemos qué riesgos para la salud pueden presentar", agrega Lesliam Quirós-Alcalá, coautora e investigadora principal de la investigación y profesora de ciencias medioambientales e ingeniería de esa casa de estudios, quien se ha enfocado en analizar los efectos de la exposición a químicos en grupos minoritarios.
A diferencia de las manicuristas, cuya exposición a sustancias tóxicas ha sido ampliamente documentada, poco se sabe del riesgo que corren las peluqueras al trabajar a diario con productos como tintes, decolorantes del cabello, alisadores y otros, lo que motivó a Quirós-Alcalá y a sus colegas a indagar más en asunto.
Peluqueras hispanas y negras tienen exposiciones más elevadas a químicos
Se estima que hay más de 700,000 estilistas en EEUU, de las cuales 90% son mujeres y 30% son hispanas o negras. Muchas de ellas están en edad reproductiva y trabajan durante el embarazo, por lo que el riesgo de exposición a sustancias tóxicas bien podría afectar a sus hijos.
Debido a la clientela a la que sirven y a los servicios que prestan, las peluqueras de color están más expuestas a químicos para el cabello como alisadores.
“Nuestro trabajo anterior ha demostrado que las peluqueras negras y latinas tienen exposiciones elevadas a algunos de los ‘sospechosos habituales’ (muchos ftalatos y compuestos orgánicos volátiles) en comparación con las mujeres de la población de EEUU. Por ejemplo, los niveles medios de un ftalato, MEP, fueron 41 veces mayor que las mujeres chinas con insuficiencia ovárica prematura y 4 veces mayor que las mujeres blancas estadounidenses que buscan tratamiento de fertilidad”, explica Quirós-Alcalá.
En salones de belleza frecuentados por negras e hispanas es común que la clienta sea quien lleve el producto que en algunos casos proviene de otros países con regulaciones más laxas o inexistentes, comenta en conversación con Univision Noticias.
Pero ni siquiera hay garantías de que aquellos fabricados en EEUU sean seguros. “Al igual que ocurre con otros productos de cuidado personal, los fabricantes no están obligados a enumerar todos los ingredientes que contienen los productos para el cabello como el alisador o tinte. Bajo la palabra ‘fragancia’, pueden englobar numerosos químicos que se consideran información privada de la empresa y estas no están en obligación de divulgar”, aclara.
El gobierno estadounidense no requiere de estudios que avalen la seguridad de los ingredientes usados en los productos de cuidado personal y tampoco tiene regulaciones que certifiquen que aseveraciones como “libre de ftalatos y parabenos”, sean ciertas.
Alisadores de cabello con formaldehído ya han sido asociados a problemas de salud
El año pasado, la istración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) alertó a la población sobre la presencia en muchos alisadores de cabello del formaldehído -clasificado como cancerígeno por la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer-.
Así no sea agregado como ingrediente, el formaldehído también puede liberarse de forma natural cuando las planchas para el cabello y los aerosoles para plancha se usan a altas temperaturas.
Los resultados del estudio piloto de la Universidad de Johns Hopkins indican que además de este que se anticipa encontrar en salones de belleza, hay muchos otros que ni siquiera han sido identificados y cuyos efectos sobre la salud se desconocen.
Las trabajadoras de salones de belleza están expuestas a estas sustancias químicas a través de la piel y al inhalarlas.
Un estudio reciente del Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental (NIEHS por sus siglas en inglés) que analizó la evolución durante 11 años de más de 33 mil mujeres encontró que aquellas que reportaron el uso frecuente de alisadores de cabello tuvieron mayor riesgo de desarrollar cáncer de cuello uterino.
En la muestra de 23 estilistas hispanas y negras que participaron en el estudio de la Universidad de Johns Hopkins, varias de ellas reportaron tener asma y la mayoría de las estilistas con asma recibió el diagnóstico durante el tiempo en que ya trabajaban en peluquerías.
Esto se corresponde con los hallazgos de una investigación realizada en el Norte de Europa que en 2013 concluyó que las estilistas tenían uno de los mayores riesgos del desarrollo de asma en edad adulta.
Faltan regulaciones más estrictas en salones de belleza
Si bien existen leyes federales de seguridad ocupacional, las reglas y regulaciones de salud en salones de belleza recaen en la praxis sobre juntas estatales de cosmetología y barbería. En consecuencia, varían entre estados y rara vez son lo suficientemente específicas como para abordar la exposición a sustancias químicas tóxicas en los salones.
Muy pocas normas establecen requisitos mínimos de ventilación en los salones e, incluso cuando las hay, la capacidad para hacerlas cumplir es limitada, advierte el reporte Beauty & Its Beast elaborado por la organización Women’s Voices.
Buscar otro trabajo no es una opción viable para las estilistas en la mayoría de los casos. “Nos dicen, sí nos preocupa; sí, tenemos síntomas, pero no nos podemos dar ese lujo”, cuenta la investigadora principal Lesliam Quirós-Alcalá a Univision Noticias, quien recalca que el estudio fue pequeño y observacional, por lo que no hay que precipitarse a sacar conclusiones.
“La presencia de esos químicos en la orina indica que estuviste expuesta y el hecho de que estamos viendo que los niveles de muchos químicos son más altos en las mujeres negras e hispanas no se puede ignorar. Por ello necesitamos hacer más estudios para saber cuáles podrían ser los efectos en la salud de estos químicos y para prevenir estas exposiciones y cualquier daño que estas podrían causar”, insiste.
Cómo protegerte si trabajas en un salón de belleza
Entre las recomendaciones para minimizar la exposición a químicos y mejorar el ambiente en el aire en salones de belleza están:
- Evita que los productos para el cabello contengan químicos (VOCs) como: 1,3-dimetilol-5,5, dimetilhidantoína (DMDM hidantoína), acetona, acetato de butilo, diazolidinilurea, ftalatos de dibutilo, acetato de etilo, alcohol etílico, metacrilatos de etilo, formaldehído, alcohol isopropílico, metil etil cetona, metil metacrilatos, metilenglicol, hidróxido de sodio oalcio, tolueno.
- Usa guantes de neopreno o nitrilo para proteger las manos cuando trabajes con productos para el cabello que puedan irritar la piel.
- Desecha los guantes después de cada uso.
- Lávate las manos antes y después de cada servicio.
- Usa una bata / delantal al relajar o teñir el cabello.
- Cierra bien las tapas de los productos cuando no estén en uso.
- Usa botes de basura que contengan tapas y ciérralas bien, especialmente al desechar artículos empapados en productos químicos.
- Designa un área en el salón donde se puedan guardar todos los botes de basura que contengan artículos empapados en productos químicos. Esta área debe estar ubicada lejos de clientes y trabajadores de salón.
- Saca la basura al basurero todos los días.
- Intenta cortar el cabello de la cliente antes de aplicar tinte para el cabello u otros productos químicos para reducir el o químico con las manos.
- Procura mantener las ventanas y puertas abiertas en momentos de baja congestión de tráfico.