Los jóvenes de EEUU tienen 82 veces más posibilidades de morir por arma de fuego que en otros países desarrollados
Una amenaza de salud pública a los niños. Así cataloga la violencia por armas de fuego la Asociación Estadounidense de Pediatría en un nuevo tiroteo ocurrido en Parkand y en el que instan a las autoridades a tomar “acciones significativas” para proteger a los menores de edad, las familias y las comunidades.
En lo que va de año han ocurrido peor de los países desarrollados para nacer, pues allí los niños tienen hasta 70% más probabilidades de fallecer que en otras naciones democráticas del primer mundo como Canadá, Japón, Australia, Francia, Suiza o Reino Unido.
Esa misma investigación llegó a la conclusión de que los jóvenes estadounidenses con edades entre 15 y 19 años tienen hasta 82 veces más posibilidades a morir por arma de fuego y el doble de fallecer en un accidente automovilístico que en otros países desarrollados.
“Los niños están muriendo por la violencia y el Congreso está fallando en actuar. Cada uno de los cien senadores y 435 de la Cámara de Representantes tienen la responsabilidad de tomar acciones significativas para protegerlos. Nuestros líderes electos no pueden seguir fallando en esta tarea tan esencial”, se lee en el statement de la AAP firmado por su presidente, Colleen Kraft.
Destaca que no solo los tiroteos no son el único problema que deriva de las laxas regulaciones del control de porte de armas en EEUU. “Nuestros niños también enfrentan un riesgo a diario por suicidio, homicidio y heridas no intencionales”, aclara.
Según los Centros para el Control de Enfermedades, el índice de mortalidad en adolescentes con edades entre 15 y 19 años es de 45 por cada 100,000. Accidentes, homicidio, suicidio son las principales causas.
Más de un tercio de las víctimas de homicidios en Estados Unidos son jóvenes.