Las temperaturas peligrosas que se han reportado en los últimos días afectan a por lo menos 60 millones de estadounidenses. El viento, la nieve y el frío intenso han causado estragos en diferentes zonas del país. De acuerdo con las autoridades, seis personas han muerto a causa de las malas condiciones del tiempo. Además, más de 220,000 hogares se quedaron sin electricidad en Virginia, West Virginia, Kentucky, Indiana e Illinois.
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