Vanessa Romo es una joven de 23 años que vive en Los Ángeles. Su familia es de Jalpan, Zacatecas, México, a donde viajaba cada verano cuando era niña. Se graduó en estudios chicanos, y desde que estaba en la escuela media supo que era una luchadora, porque a pesar de que la gente le decía que no lograría hacer ciertas cosas, al final ella las hacía. Instagram
Su objetivo fue demostrar que el modelaje no es una cosa fácil: "no es tan fácil para todos ponerse frente a la cámara, verse natural y saber cómo mover su cuerpo". Explica que a ella le tomó dos años aprender a hacerlo: "cuando empecé no sabía cómo moverme, cómo posar, pero es algo que también se debe aprender". Instagram
Antes de dedicarse al modelaje, Vanessa no se tomaba fotos; si acaso se hacía selfies. Lograr la confianza que ahora presume y muestra como talento no fue fácil. Ha sido un proceso que comenzó cuando se cansó de no querer verse en el espejo, de tener baja autoestima y sentirse mal con su cuerpo. Ella quería ser como las otras chicas: tener confianza, divertirse, tomarse fotos con sus amigas y mostrar confianza en ellas. Instagram
Cuando empezó a tomarse fotos estaba tratando de cambiar cómo se sentía, y aunque aún no tenía confianza y más bien fingía, después de dos años de practicar lo logró: "Ahora sí en verdad quiero mi cuerpo, honestamente ya lo veo y digo: 'me encanta mi cuerpo y lo amo tal como es, y eso es lo que quiero demostrar en este programa, que tenemos que querer a nuestros cuerpos, porque sino no vamos a ser felices'". Instagram
Para superar sus miedos también le ayudó ver diferentes tipos de cuerpos: "me di cuenta de que allá afuera hay un mundo de mujeres plus size, que son hermosísimas y que no tienen demasiada atención, y dije: yo tengo que mirar esos ejemplos, son cuerpos que se parecen más al mío". Instagram
Para Vanessa el que las marcas estén volteando a ver a las mujeres plus size puede ser una tendencia de la que sólo quieren enviar una imagen de inclusión o ganar dinero, "pero es mejor que nada. Estoy feliz de que lo estén haciendo porque están demostrando un nuevo punto de vista", dijo.
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Vanessa también es una fiel representante de la misión que este año tiene Univision: sin tallas, sin límites, sin excusas. Ella también opina que las mujeres están listas para rechazar los estereotipos: "no es verdad que uno tiene que ser alto, flaco, rubio con ojos azules. Esa no es la única belleza. Estoy feliz de que estamos tratando de ser más inclusivos y respetuosos con la diversidad". Crédito: Felipe Cuevas