Niña dominicana de 4 años lucha por caminar: sus padres buscan apoyo para costosa cirugía en EEUU y evitar amputación
Detrás de la sonrisa luminosa de Aurora, una niña dominicana de apenas cuatro años, se esconde una historia marcada por el dolor, la resiliencia y una lucha constante. Su diagnóstico de hemimelia fibular, una rara malformación congénita que afecta el desarrollo óseo de sus extremidades inferiores, ha llevado a sus padres a buscar desesperadamente los recursos necesarios para evitar la amputación de su pierna y brindarle la oportunidad de caminar.
Michelle Lizardo y Guillermo Pérez, padres de Aurora, recuerdan con emoción la llegada de su hija, su “bebé arcoíris”, después de haber enfrentado varias pérdidas. Su embarazo transcurría sin complicaciones hasta la semana 20, cuando una sonografía reveló la condición congénita que cambiaría sus vidas. “Me dio fuerzas que yo no sabía que tenía”, relata Michelle al recordar el momento en que supo que Aurora enfrentaría desafíos desde antes de nacer.
La hemimelia fibular de Aurora incluye la ausencia del peroné, acortamiento de la tibia y la falta de dos dedos en el pie afectado. La única alternativa que ofrecían los especialistas en República Dominicana era amputar su pierna, una opción que sus padres se rehusaron a aceptar. Con esfuerzo y determinación, buscaron una alternativa médica fuera del país.
En abril de 2023, Aurora fue sometida a su primera cirugía de alargamiento y reconstrucción de pierna en el extranjero, un procedimiento complejo y doloroso que incluyó el uso de clavos ortopédicos. Gracias a la intervención y a intensas terapias físicas, Aurora logró dar sus primeros pasos.
A pesar de este avance, la diferencia entre sus piernas aún es de siete centímetros, lo que intenta compensar con una bota ortopédica. “Sus ganas de no tenerle miedo al dolor físico para lograr subir una escalera y divertirse como un niño normal... eso te da fuerzas”, comparte Michelle conmovida.
Según la ortopedista Rosa Vidal, no completar el tratamiento médico podría comprometer gravemente la movilidad de Aurora. “El no tratarla sería provocarle grandes trastornos funcionales a su marcha”, advierte la especialista.
Hoy, los padres de Aurora enfrentan una carrera contrarreloj. La niña necesita una segunda cirugía que solo puede realizarse en el Instituto Paley, en Florida, Estados Unidos. El costo total asciende a 160,000 dólares, una suma que supera los recursos disponibles incluso para plataformas de recaudación.
“Este caso va más allá de lo que hemos podido recaudar antes. Pero no hay ayuda pequeña”, afirma María Aquino, representante de Jompéame.
Guillermo, el padre de Aurora, se mantiene esperanzado. “Que pueda caminar, correr, bailar... todo lo que un niño hace en su desarrollo”, dice. “Estamos luchando para darle eso”.
Quienes deseen apoyar a esta familia en su meta de reunir los fondos necesarios para la operación pueden comunicarse vía WhatsApp con Michelle Lizardo, madre de Aurora, al número 809-910-9562.