Mexicanos explotando mexicanos: rescatan a 14 inmigrantes en ranchos de EEUU

Una acusación criminal desvelada esta semana afirma que 14 mexicanos indocumentados eran forzados a trabajar en varios ranchos de Wisconsin en 2016. Para evitar que escaparan, sus patrones les quitaron sus pasaportes, además de que los amenazaron con golpearlos y denunciarlos ante las autoridades.
El Distrito Este de Wisconsin de la Fiscalía federal anunció este miércoles que se presentaron cargos relacionados con el tráfico humano, la explotación laboral y otros delitos contra cinco hispanos que contrataron a las 14 víctimas, los transportaron a los ranchos, sometieron documentación falsa para ocultar que se trataba de personas sin autorización para trabajar en el país y obtuvieron por ello un beneficio económico.
Los sospechosos son Saul García, de 49 años; Saul García Jr, de 26; Daniel García, de 28; Consuelo García, de 45; y María Remedios García Olalde, de 52. Los cuatro primeros son vecinos de Moultrie, en el estado de Georgia; mientras que la última acusada es de México.
Si son encontrados culpables enfrentarían una condena hasta 20 años de prisión por los cargos de conspiración, tráfico y obtener beneficios financieros relacionados con el trabajo forzoso, así como obstrucción de una investigación de tráfico laboral y manipulación de testigos.
El Departamento de Justicia (DOJ) identifica a los afectados solo con las iniciales AV y números del 1 al 14. Todos son hombres adultos originarios de México. Se desconoce dónde se encuentran ahora.
Este caso es el resultado de una investigación que durante varios años realizaron del Equipo Especial contra el Tráfico Humano de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), en colaboración con agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) y de la Policía de Racine.
La acusación alega que los García reclutaron a sus víctimas en febrero de 2016 y que en julio de ese año los transportaron ilegalmente desde Georgia hacia varios ranchos en el este de Wisconsin. Antes solicitaron visas H-2A para trabajadores agrícolas temporales, indicaban que solo estarían en Georgia.
Pero en Wisconsin les entregaron a los 14 mexicanos tarjetas de residentes permanentes y de Seguro Social falsas. Dichos documentos apócrifos estaban bajo otros nombres, señala la Fiscalía.
De acuerdo con documentos judiciales desvelados el miércoles, los patrones les quitaron los pasaportes “con el fin de mantener el trabajo y servicios (…) cuando fueron víctimas de una grave forma de tráfico humano”. También, les advirtieron que si se iban les causarían un “daño grave” o interpondrían procesos legales en su contra, lo cual incluía denunciarlos ante las autoridades.
Estos 14 mexicanos padecieron condiciones casi de esclavitud en 15 propiedades de Georgia, la mayoría de las cuales se encuentran en las ciudades de Moultrie, Norman Park, Adel, Sparks, Hahira y Pavo. La Fiscalía busca confiscar estos bienes, así como tres camiones de carga, 12 camionetas SUV y pick up, además de casi 50,000 dólares obtenidos a través del tráfico de personas.
Para evitar la justicia, los García trataron de ocultar evidencia, mintieron a los investigadores y en octubre de 2018 trataron de convencer de alguna manera a dos víctimas, identificadas como AV-13 y AV-14, para que no testificaran en su contra, alegan los fiscales.
“Traficar a otro ser humano es un crimen particularmente vil”, dijo el fiscal federal Matthew D. Krueger, en un comunicado. “El Departamento de Justicia está comprometido a procesar a cualquiera que busque vender la libertad de otra persona”, agregó el funcionario.
El FBI advierte que la trata de personas es la tercera actividad criminal más grande del mundo y describe que ese delito incluye el trabajo forzado, la servidumbre doméstica y la trata sexual comercial. Señala que en este país las víctimas son tanto estadounidenses como inmigrantes. La agencia indica que durante la última década arrestó a más de 2,000 traficantes y rescató a varios afectados de ese flagelo.