Después de odiarlo e intentar eliminarlo, muchos republicanos en campaña ahora defienden Obamacare
El tema de la atención médica está dominando la agenda de la campaña en las elecciones de mitad de periodo para el Congreso de Estados Unidos, al punto que los expertos dicen que podría determinar el resultado en algunos casos.
Después de atacar durante años a los demócratas por presuntamente intentar imponer un "impuesto" a la atención médica en la forma de la Ley del Cuidado de Salud Asequible de 2010, mejor conocido como Obamacare, los republicanos ahora se encuentran en la contradicción de defenderla después de que las encuestas muestran que ha crecido en popularidad.
Frente a esta cambiante realidad política, los republicanos en una serie de competencias clave en lugares como Texas, Florida, Arizona y Nevada están intentando un cambio y adoptar elementos de la ley a última hora, como la cobertura de enfermedades preexistentes y los planes familiares para menores de 26 años.
Mientras el presidente Donald Trump ha tratado de convertir las elecciones en una conversación sobre inmigración y la amenaza de la caravana de migrantes que avanza rumbo a la frontera sur, los candidatos republicanos se sienten repentinamente vulnerables en el tema de la política de salud.
Unos 20 millones más de estadounidenses obtuvieron un seguro de salud después de que se aprobara la ley de Obamacare y, a pesar de los repetidos esfuerzos republicanos por derogarla, la ley ha sobrevivido y las primas han comenzado a disminuir finalmente.
El cuidado de salud es el tema principal en anuncios políticos para ambas partes en las competencias federales, según el Wesleyan Media Project, aunque los demócratas se refieren al tema más del doble de veces que los republicanos.
"Después de que se aprobó la Ley del Cuidado de Salud Asequible, los demócratas trataron de evitar la atención médica como tema de conversación de la campaña, mientras que los republicanos lo utilizaron como un punto central de ataque", dijo Erika Franklin Fowler, codirectora del Proyecto de Medios de Wesleyan.
"El control republicano del gobierno ha cambiado el cálculo para ambos partidos en este ciclo, con los demócratas en la ofensiva y los republicanos en busca de nuevas formas de hablar sobre el asunto".
El público estadounidense se ha inclinado drásticamente a favor de los demócratas sobre Obamacare. Hace cuatro años, el 48% de los votantes registrados sentían que la ley iba demasiado lejos, pero ahora se ha reducido al 36%, según una nueva encuesta de Fox News. Mientras tanto, la mayoría piensa que es correcto (21%) o no fue lo suficientemente lejos (30%). Y el 64% de los votantes registrados quieren ver a más personas aseguradas, incluso si eso le cuesta más dinero al gobierno.
Una encuesta de agosto de Ipsos encontró que el 16% de los estadounidenses dijo que el cuidado de la salud era el problema más importante que enfrenta Estados Unidos, mientras que el 15% nombró inmigración y el 11% la economía.
Arizona
En Arizona, la candidata republicana y actual congresista Martha McSally dice que no se arrepiente de sus votos para derogar la ley en 2015. Ahora McSally se encuentra luchando contra una avalancha de anuncios publicitarios de su rival demócrata, Kyrsten Sinema, en una carrera más contienda de lo pronosticado.
Recientemente se le preguntó a McSally si votaría de nuevo para derogar la ley de cuidado de salud. "Voté para derogar y reemplazar a Obamacare ... Me están pateando el trasero ahora mismo porque los demócratas lo están malinterpretando", dijo al programa de radio conservador de Sean Hannity. "Están tratando de invocar el miedo en personas que tienen familiares o seres queridos con enfermedades preexistentes", añadió.
Aunque dice que el modelo de Obamacare no ha funcionado, McSally sostiene que apoya la protección de las personas con condiciones preexistentes y que no volvería a la situación anterior a la aprobación de la ley federal en 2010.
"Claramente, las condiciones preexistentes son kryptonitas para los republicanos porque los demócratas han hecho de esta elección un referéndum sobre cómo se maneja este problema", dijo Fernand Amandi, un consultor demócrata en Miami.
Texas
Uno de los giros más sorprendentes ha ocurrido en Texas, donde el senador Ted Cruz ahora defiende uno de sus elementos centrales. Cruz desempeñó el papel principal en el cierre del gobierno en 2013 en un intento fallido por revocar Obamacare. Luego, el senador hizo campaña presidencial en 2016 con la promesa de derogar "cada palabra" de Obamacare. Ahora, dice que está a favor de mantener la protección para todas aquellas personas con enfermedades preexistentes.
"Todos están de acuerdo en que vamos a proteger las condiciones preexistentes", dijo Cruz mientras criticaba el Obamacare por aumentar las primas de seguros durante un debate con su contrincante demócrata Beto O'Rourke hace dos semanas.
El congresista O'Rourke, dijo: "No sé cómo va a revocar cada palabra de la Ley del Cuidado de Salud Asequible y mantener las protecciones para condiciones preexistentes".
Sin embargo, Cruz también promociona su propio proyecto de ley para crear un mercado de atención médica que ofrezca algunos planes que no cumplan con los requisitos de Obamacare.
Los demócratas han gastado casi 125 millones de dólares en publicidad televisiva enfocada en la atención médica este año, en comparación con los 50 millones de dólares en publicidad centrada en la atención médica de los republicanos, según la firma de seguimiento de publicidad política Kantar Media/CMAG.
Esto se produce cuando los expertos de la industria están aclamando una nueva estabilidad en Obamacare y una confianza renovada en el intercambio federal por parte de las aseguradoras que antes eran precavidas.
Se espera que la prima del plan mediano de Obamacare en la bolsa federal disminuya en un 1,5-2% para 2019, luego del aumento del 37% que sufrió en 2018. También se espera que la cantidad de aseguradoras en la bolsa federal crezca por primera vez desde 2015. En los últimos dos años, el 44% de las compañías que ofrecían planes bajo Obamacare han abandonado el programa.
Aunque su nombre no figura en la boleta de este noviembre, el presidente Trump no es inmune al debate sobre la atención médica. También ahora defiende las condiciones preexistentes mientras critica a los demócratas por abogar por un sistema universal: 'Medicare para todos', que ha calificado de "socialismo radical".
El secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, dijo que la istración de Trump merecía crédito por la caída de las primas durante un discurso a fines de septiembre. "Resulta que, cuando hay un presidente que está dispuesto a tomar medidas decisivas, que entiende los negocios, que está dispuesto a trabajar con el sector privado, puede encontrar una manera de ayudar a los pacientes estadounidenses, incluso dentro de un sistema fallido como el ACA", dijo Azar.
Pero ese argumento no parece estar funcionando con muchos electores, quienes recuerdan que el mandatario fustigó a los republicanos por no lograr derogar la ley en 2017 y amenazó con dejarla morir, al tiempo que ha disminuido el apoyo de fondos federales para los planes que se ofrecen.
Florida
En otra contienda por el Senado en Florida, el candidato republicano Rick Scott, se ha enfrentado a su oposición a Obamacare, así como a su decisión de rechazar, como gobernador, los fondos federales para ampliar el programa estatal de Medicaid que iban aparejado con la nueva legislación.
Scott, un multimillonario que precisamente hizo su fortuna como propietario de una firma de atención médica, dijo en un comunicado a principios de este mes que las protecciones para personas con enfermedades preexistentes eran una de "algunas cosas buenas en este proyecto de ley de 1,000 páginas", retomando la crítica republicana al grosor de la reforma lograda por Obama.
El actual gobernador defendió su postura, que incluye un nuevo anuncio de televisión en el que Scott dice que obligaría a las compañías de seguros a cubrir a personas con afecciones preexistentes como el cáncer, la diabetes y el asma.
Pero el candidato demócrata, el senador Bill Nelson, dice que la aparente conversión de Scott llega demasiado tarde. "Rick Scott trató de evitar que aprobáramos (Obamacare) en primer lugar", dijo Nelson en un evento en Orlando a principios de este mes. “Desde entonces, Rick Scott ha estado tratando de derogar la ley”, subrayó.
También en Florida, el candidato demócrata a la gobernación, Andrew Gillum, lanzó un nuevo anuncio contra su opositor republicano, el exrepresentante Ron DeSantis, por votar en contra de Obamacare, acusando que "DeSantis exigió que cualquier nueva ley de salud elimine las protecciones para las personas con condiciones preexistentes".
DeSantis respondió destacando las llamadas de Gillum para un sistema de salud universal, y dijo que Gillum apoya un plan "que aboliría la atención médica privada para millones de floridanos".