Hunter Biden es acusado de cargos federales por declaraciones falsas en la compra de un arma de fuego
Hunter Biden, hijo del presidente de EEUU, fue acusado este jueves de cargos federales vinculados con declaraciones falsas en la compra de un arma de fuego.
La acusación sigue un dilatado proceso en que una jueza rechazó un acuerdo de culpabilidad alcanzado inicialmente.
David Weiss, recientemente nombrado fiscal especial en el caso, había anunciado a inicios de mes que presentaría cargos contra Biden antes del 29 de septiembre.
Hunter Biden está acusado de mentir sobre su consumo de drogas cuando compró un arma de fuego en octubre de 2018, período en el que reconoció que luchaba contra la adicción al crack, según la acusación presentada en una corte federal de Delaware.
El hijo del mandatario también ha sido investigado por sus negocios. El fiscal especial que supervisa el caso ha indicado que los cargos de no pagar a tiempo sus impuestos podrían presentarse en Washington o en California, donde vive.
Hunter Biden en la mira de los republicanos en el Congreso
La acusación se produce mientras los republicanos del Congreso llevan a cabo una investigación de juicio político contra el presidente demócrata, en gran parte por los negocios de Hunter Biden.
Los republicanos aseguran que han obtenido testimonios sobre cómo Hunter Biden utilizó la “marca Biden” para conseguir trabajo en el extranjero, pero no han presentado pruebas de que el presidente haya actuado mal.
La acusación formal dice que Hunter Biden mintió en un formulario requerido para cada compra de armas cuando adquirió un Colt Cobra Special en una armería de Wilmington, Delaware, en octubre de 2018.
Se le acusa de marcar una casilla que decía falsamente que no usaba ni era adicto a drogas.
Un acuerdo anterior de Hunter Biden con la fiscalía no funcionó
Un cargo por arma de fuego contra Hunter Biden, de 53 años, había sido previamente parte de un acuerdo de declaración de culpabilidad que también incluía delitos fiscales menores, pero el acuerdo fracasó durante una audiencia judicial en julio cuando una jueza, elegida por Trump, planteó dudas sobre sus disposiciones.
Los abogados defensores han argumentado que una parte del acuerdo, que evita el procesamiento de Hunter Biden por el arma, sigue vigente e incluye disposiciones de inmunidad contra otros posibles cargos.
Los fiscales, sin embargo, sostienen que el acuerdo nunca entró en vigor y ahora es inválido.
El acuerdo de culpabilidad habría permitido a Hunter Biden cumplir la libertad condicional en lugar de la cárcel después de declararse culpable de no pagar impuestos tanto en 2017 como en 2018.
Sus ingresos personales durante esos dos años ascendieron a aproximadamente 4 millones de dólares, incluidos honorarios comerciales y de consultoría de una empresa que formó con el director ejecutivo de un conglomerado empresarial chino y la empresa energética ucraniana Burisma.
Los republicanos del Congreso han continuado sus propias investigaciones sobre el manejo del caso por parte del Departamento de Justicia, así como sobre casi todos los aspectos de los negocios de Hunter Biden, buscando conectar sus asuntos financieros directamente con su padre.
Sin embargo, no han podido presentar pruebas de que el presidente participara directamente en el trabajo de su hijo, aunque a veces cenaba con los clientes de su hijo o los saludaba durante las llamadas.