Pacto bipartidista sobre asilo y seguridad fronteriza está más cerca: ¿qué está en juego para 2024?
Tras semanas de agotadoras negociaciones sobre el acuerdo bipartidista sobre seguridad fronteriza e inmigración para desbloquear la estancada ayuda a Ucrania parecen estar comenzando a tomar forma.
Las conversaciones entre la Casa Blanca y senadores claves, indica la agencia AP, no se han desviado de tres áreas principales de discusión: disuadir a los migrantes de ir a EEUU; endurecer protocolos de asilo en la frontera con México y reforzar la seguridad fronteriza con personal y tecnología.
El Senado está de vacaciones hasta el 8 de enero, por lo que probablemente la resolución de esta cuestión tenga que esperar hasta el próximo año.
Antes de entrar en receso, el líder de la mayoría en la Cámara Alta, Chuck Schumer, y el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, en una inusual declaración conjunta indicaron que las negociaciones están progresando. También se reunieron para discutir cómo avanzar en la política fronteriza junto con el paquete de ayuda de 110 mil millones de dólares que el presidente Joe Biden busca enviar a Ucrania e Israel.
Aquí las claves de lo que se está discutiendo y lo que planean profundizar durante las próximas semanas:
Más dureza para las solicitudes de asilo
Los negociadores del Senado se han centrado en el asilo, mediante el cual EEUU ofrece protección a quienes enfrentan persecución en sus países.
Los críticos dicen que demasiadas personas que pasan su entrevista inicial de asilo no terminan obteniéndolo. Pero debido a que los tribunales de inmigración están tan atrasados cuando se toma la decisión final, muchos ya han estado en el país durante años, lo que hace que deportarlos sea más difícil y costoso.
Los senadores y el gobierno de Biden han considerado endurecer el estándar de miedo creíble que se utiliza en las entrevistas iniciales para determinar si los inmigrantes que buscan asilo probablemente tendrían un caso ganable ante un juez de inmigración.
Los defensores de los inmigrantes argumentan que el estándar de miedo creíble es bajo en reconocimiento del hecho de que los inmigrantes generalmente han huido de condiciones desesperadas y no tienen representación legal.
Más seguridad en la frontera
Fueron los republicanos quienes exigieron negociaciones sobre la frontera, negándose a brindar ayuda a Ucrania mientras lucha contra la invasión rusa, a menos que Biden acepte cambios para reducir la inmigración.
Si bien Biden había propuesto inicialmente 14 mil millones de dólares para reforzar la seguridad fronteriza, los republicanos dijeron que el dinero no era suficiente.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza están abrumados procesando a los inmigrantes que se entregan en busca de asilo. Biden había propuesto 3,100 millones de dólares para agentes adicionales. Los partidarios dicen que el dinero es crucial para abordar el atraso en tribunales de inmigración.
Biden también ha sugerido 1,200 millones de dólares para los agentes de Aduanas y Protección Fronteriza y los sistemas de inspección para detener el flujo de fentanilo. El presidente también propuso fondos para ayudar a ciudades -en su mayoría demócratas- que están recibiendo ola récord de inmigrantes. Los republicanos se han resistido.
Reducir la llegada de migrantes a la frontera
Uno de los problemas más difíciles de resolver para los legisladores es cómo disuadir a los inmigrantes de emprender sus viajes a EEUU, en particular de países que experimentan desastres económicos o violencia de pandillas generalizada.
Los senadores han discutido formas para que se solicite asilo antes de llegar a la frontera, ya sea en su país de origen o en un país de tránsito. La istración Biden había lanzado un nuevo sistema que alienta a las personas que buscan asilo a programar una cita por app.
En las conversaciones, la Casa Blanca ha insistido en mantener la entrada de 30,000 personas al mes procedentes de Venezuela, Nicaragua, Cuba y Haití si cuentan con patrocinador financiero y vuelan al país. Buscan crear un sistema más ordenado que reduzca el caos en la frontera, al tiempo que están llegando cantidades récord de inmigrantes.
¿Cómo se van a aplicar las medidas?
Este punto de la discusión es complicado. Un posible punto clave para los legisladores establecería un umbral para el número de cruces fronterizos y, una vez que se alcance ese número, entrarían en vigor medidas más estrictas.
Según ese sistema, si los cruces aumentan demasiado, las autoridades cerrarían la frontera para asilo y permitirían expulsiones rápidas de migrantes.
Los defensores de los inmigrantes temen que algunas de las restricciones puedan impulsar la acumulación de inmigrantes del lado de México. También advierten que las medidas de expulsión aceleradas convertirían en ley políticas duras al estilo de Trump, haciéndolas potencialmente difíciles de impugnar en tribunales.