Biden hace cambios a política hacia Cuba y Venezuela: ¿qué impacto puede tener en el voto en Florida?
El reciente anuncio de un modesto ablandamiento en la campaña de "máxima presión" de Donald Trump para presionar a Cuba y Venezuela hace que muchos analistas se pregunten si el gobierno de Biden ha renunciado a Florida, aceptando que ahora es un estado republicano.
"En caso de que tuvieras alguna duda de que Florida ya no es un estado prioritario para los demócratas", escribió en Twitter Fernand Amandi, un encuestador y estratega de las campañas demócrata con sede en Miami tras conocerse la noticia de la política hacia Cuba y Venezuela.
Después de meses de silencio sobre Cuba y Venezuela, la Casa Blanca emitió en rápida sucesión algunos cambios a las políticas que dejó Trump. Pero las medidas fueron recibidas con un aluvión de protestas por parte de los republicanos y sólo recibieron tibios elogios por parte de algunos demócratas, amenazando con socavar aún más a los demócratas en el sur de Florida donde la política sobre Cuba y Venezuela juega un papel sobredimensionado en las elecciones.
" Todo el mundo critica su política a Venezuela y nadie está a favor de lo que está haciendo", dijo Ramón Muchacho, un exalcalde venezolano exiliado que ahora trabaja como analista político y financiero en Miami. "Está logrando alienar a todos los que están a favor de la apertura hacia Venezuela y los que están en contra de una apertura. Ha alienado totalmente a todos los sectores", añadió.
En ambos casos, el de Cuba y el de Venezuela, hubo elementos de los cambios de política con los que algunos pudieron estar de acuerdo, pero éstos fueron anulados por la inclusión de otros cambios que encontraron poco apoyo en el sur de Florida y dejaron a algunos rascándose la cabeza en busca de una explicación.
Funcionarios de la istración niegan que tenga algo que ver con una próxima cumbre de jefes de Estado de América Latina y el Caribe que se celebrará en Los Ángeles la próxima semana.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha amenazado con boicotear la cumbre si no se invita a Cuba y Venezuela. Pero el gobierno de Biden se resiste a recibir a cualquier líder que no haya sido elegido democráticamente.
Los pros y los contras de las políticas de Biden sobre Cuba y Venezuela
En cuanto a Cuba, los asesores de Biden anunciaron que la Casa Blanca estaba reforzando la sección consular de la embajada estadounidense en La Habana para poder tramitar más visados para que los cubanos se reúnan con sus familiares cercanos en Estados Unidos.
Los asesores continuaron diciendo que la istración Biden también elevaría el tope de remesas familiares de 1,000 dólares por trimestre y permitiría pequeños negocios del sector privado de la isla, altamente regulados, así como permitiría el regreso de los viajes en grupo de los estadounidenses a Cuba, siempre que fueran educativos y no demasiado turísticos.
En cuanto a Venezuela, la istración señaló cierta flexibilización de las sanciones al sector petrolero para permitir que la empresa estadounidense Chevron siga operando allí, siempre y cuando el presidente Nicolás Maduro acepte dialogar con la oposición. Entre las concesiones a Caracas esta la retirada de la lista de venezolanos sancionados por el Tesoro a Carlos Erik Malpica-Flores, un exfuncionario de alto rango de PDVSA y sobrino de la primera dama de Venezuela.
La separación de familias y la falta de visados en Cuba provocan una nueva crisis migratoria
"La política hacia Cuba se lleva a cabo mejor con un bisturí, no con un machete", dijo Manny Díaz, presidente del Partido Demócrata de Florida, en un comunicado.
Díaz se centró en el tema de la reunificación familiar, destacando cómo muchas familias fueron separadas por la política draconiana de la pasada istración de prácticamente cancelar los acuerdos migratorios y eliminar la capacidad de obtener visados en Cuba.
"La separación de las familias cubanas ha sido el resultado más trágico de la dictadura cubana y este paso ayudará a aliviar la carga de miles de cubanos", agregó.
Añadió que la nueva política también reduciría la migración ilegal de cubanos que se embarcan en balsas no aptas para la navegación para cruzar el Estrecho de la Florida, o emprenden la casi igualmente peligrosa travesía por Centroamérica y México "que puede conducir a innumerables tragedias".
Pero las remesas y los viajes en grupo son vistos por muchos en la comunidad de exiliados como un regalo para el régimen cubano. Los viajes en grupo también son vistos por muchos como un regalo para los liberales ricos que les gusta viajar a lugares culturales exóticos, de los cuales muchos son donantes a candidatos demócratas.
La táctica "ambigua" de Biden intenta contentar a todos, pero no satisface a nadie
Aunque una política que busca hacer concesiones a todas las partes puede parecer noble, incluso sabia, en la polarizada política de Cuba y Venezuela acaba pareciendo ambigua y poco convincente, dijo Muchacho. "El lenguaje que utiliza la Casa Blanca es tan ambiguo que realmente lo que nos está mostrando es que no hay una política hacia Venezuela", dijo.
"No es que tenga una buena política ni una mala política, es que no tiene una política. Un día va adelante, un día atrás. Un día va a desmontar las sanciones, pero otro día no va a desmontar las sanciones"' agrego.
Algunos han cuestionado el momento de los cambios. Durante la campaña de 2020, Biden dejó entrever que revertiría algunas políticas de Trump hacia Cuba, volviendo a las políticas de compromiso con Cuba de la era Obama.
Pero al asumir el cargo, Biden no hizo nada, para frustración de algunos demócratas.
Entonces, las protestas callejeras sin precedentes en Cuba el pasado mes de julio llevaron a una represión por parte del gobierno comunista, con numerosas detenciones y la imposición de largas condenas de cárcel.
El gobierno de Biden anunció una amplia revisión de la política, y pareció dar marcha atrás en su promesa de reducir las sanciones.
Los republicanos arremetieron contra Biden, como era de esperar. El senador cubano-estadounidense de Florida, Marco Rubio, dijo que Biden había "ignorado por completo los retos y amenazas que plantean los regímenes malvados y corruptos en nuestro propio patio trasero".
Algunos grupos de derechos humanos respaldaron el anuncio de la política de Biden hacia Cuba. "Celebramos esta decisión del gobierno de Biden", dijo Juan Pappier, de Human Rights Watch. "La política de aislamiento no ha conseguido mejorar los derechos humanos del pueblo cubano", añadió.
Algunos diplomáticos estadounidenses también dicen que les gustaría ver un retorno a las políticas de Obama de acercarse a los cubanos en la isla. " Es hora de que el gobierno de Biden abandone su timidez respecto a Cuba," Scott Hamilton, ex jefe de misión adjunto en la embajada de Estados Unidos en La Habana de 2015 a 2017, escribió en un artículo.
"Es hora de renovar una política constructiva... y dejar de castigar al pueblo cubano por los pecados de una élite sobre la que no tiene control," agregó Hamilton, que se retiró del Departamento de Estado en abril.
Los demócratas están divididos sobre la política de Biden hacia Cuba y Venezuela
Los dos principales contendientes demócratas que desafían al gobernador republicano de Florida Ron DeSantis, Charlie Crist y la comisionada de Agricultura Nikki Fried, apoyaron las medidas de Biden.
Pero otros estaban menos seguros.
Joe García, un ex congresista demócrata por el sur de Florida, dijo que apoyaba los cambios de política de Biden, pero que criticaba la forma en que se ejecutaron. " Me alegro de que lo hayan hecho, pero me gustaría que lo hubieran hecho antes. Es la política correcta", dijo. "Es lo que prometió y lo que pedimos", añadió.
Por mucho que deteste a Trump, García le atribuyó el mérito de haber visitado Miami y haberse comprometido con los líderes de la comunidad, algo que el gobierno de Biden no ha hecho. "Tienes que hacer que la gente sea parte de la solución y mantener la plaza del pueblo. Hay que mostrarle a la gente que está conectada con las decisiones, con el poder".
Algunos demócratas, especialmente dos candidatos en carreras clave en noviembre, expresaron abiertamente su frustración.
"Aliviar las sanciones a Venezuela sólo empodera a Maduro y a sus compinches", tuiteó Val Demings, que desafía al senador Marco Rubio por su escaño. "No apoyamos al pueblo venezolano que lucha por la libertad y la democracia apaciguando su régimen asesino. Debemos centrarnos en bajar el coste de la gasolina para las familias de Florida sin dar consuelo a los dictadores."
Annette Taddeo, candidata a Gobernadora tuiteó "La istración no puede dar credibilidad a tiranos como Maduro y luego preguntarse por qué los votantes hispanos abandonan nuestro partido en números récord. La istración Biden debe dar marcha atrás inmediatamente".
Los demócratas pierden apoyo electoral en el sur de Florida
Biden tuvo un rendimiento inferior en el estado en 2020, perdiendo ante Trump por casi 400,000 votos, o 3.5 puntos porcentuales. Solo ganó en el condado de Miami-Dade por siete puntos porcentuales, en comparación con el margen de 30 puntos de Hillary Clinton sobre Trump en 2016. Miami, y el sur de Florida en general, tiene una de las poblaciones hispanas más altas del país, con un 70% en el condado de Miami-Dade, formada por exiliados que huyeron de la violencia izquierdista o de las dictaduras en Colombia, Cuba, Venezuela o Centroamérica, así como miles de brasileños y argentinos que desprecian el socialismo.
Los últimos sondeos muestran que Biden está perdiendo apoyo entre los hispanos. La valoración del presidente cayó 21 puntos porcentuales entre los hispanos en su primer año de mandato, según una encuesta de Univisión de marzo, aunque esto se debió en gran medida a la inflación y a su gestión de la economía y no a su política hacia América Latina.
Los funcionarios de la istración han afirmado con orgullo que su política exterior se basa en lo que es de interés nacional para Estados Unidos, y no en lo que podría hacer variar las elecciones en un estado clave. Los escépticos podrían haber calificado esa retórica política como diseñada para engañar, pero algunos dicen que los últimos cambios de política la hacen más creíble
A los líderes del partido demócrata no les gusta anunciarlo, pero ya no ven a Florida como algo esencial para ganar la Casa Blanca, y prefieren concentrarse en otros estados disputados como Georgia, Pensilvania y Arizona, que resultaron clave para ganar en 2020.
"Se arrancaron la tirita sobre Cuba y Venezuela", dijo un activista demócrata que pidió no ser identificado. "No se trata solo del sur de Florida. Han dado por perdido todo el estado", añadió.
