Más de 100 congresistas demandan la salida inmediata de Stephen Miller de la Casa Blanca

Más de 100 congresistas, organizaciones judías y grupos de derechos civiles están demandando a la hombre clave en el diseño de las políticas migratorias del presidente Donald Trump, tras conocerse hace poco más de una semana correos electrónicos filtrados en los que afloran sus vínculos con ideas nacionalistas blancas antes de su trabajo dentro de la istración Trump.
Los correos electrónicos de Miller fueron divulgados en un reporte del grupo de investigaciones, Southern Poverty Law Center (SPLC). La información trasluce cómo Miller promovió una retórica antiinmigrante y el supremacismo blanco durante la campaña electoral de 2016.
la reducción al mínimo en la cantidad de refugiados que EEUU ite anualmente, así como los intentos de limitar la ciudadanía para inmigrantes legales.
"Más del 80% de los correos revisados están relacionados o aparecen en cadenas (de mails) vinculadas con temas migratorios y raciales", detalla el reporte del SPLC.
La carta que demanda la salida de Miller subraya que "un nacionalista blanco documentado no tiene lugar en ninguna istración presidencial, y especialmente no en una posición tan influyente".
El representante demócrata Don Beyer dijo en un tuit que 107 de la Cámara Baja, muchos de ellos del caucus hispano y del caucus judío, suscribieron la petición.
"Hay una línea directa e inaceptable entre las opiniones nacionalistas blancas expresadas en los correos electrónicos de Stephen Miller y las políticas discriminatorias que concibió y promovió en la Casa Blanca, incluyendo la separación familiar, la prohibición de los musulmanes y los enormes recortes en la isión de refugiados", subrayó Beyer en otro tuit.
Es llamativo que también un republicano de la Cámara de Representantes, el diputado Mike Coffman (Colorado), apoya el pedido de renuncia de Miller.
Aparte de esa petición, más de 50 grupos nacionales de derechos civiles, incluyendo la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAA) y el Consejo Musulmán de Asuntos Públicos, enviaron otra carta a la Casa Blanca con una demanda similar.
"Los partidarios de la supremacía blanca y los neonazis no deberían poder servir en ningún nivel de gobierno, y mucho menos en la Casa Blanca. Stephen Miller ha alimentado el fanatismo, el odio y la división con su retórica y políticas extremas a lo largo de su carrera. La reciente exposición de su profundo racismo es una prueba más de que no es apto para el servicio y que debería abandonar inmediatamente su puesto", indica la carta que dirigen directamente al presidente Trump.
Aparte, grupos judíos que equiparan la información de los correos filtrados con el antisemitismo, también están pidiendo la renuncia de Miller, a pesar de que el funcionario también es de origen judío.
La Liga Antidifamación, la Unión para el Judaísmo Reformista, J-Street y varias organizaciones judías progresistas, incluyendo IfNotNow y Bend The Arc, se han sumado a la presión contra uno de los principales asesores del presidente.
"Como judíos estadounidenses, estamos indignados de que esta istración utilice el creciente antisemitismo por el cual es responsable al abrazar a los nacionalistas blancos como Miller", dice una petición de estas organizaciones enviada al gobierno.
David Glosser, un tío de Miller, en una columna de opinión publicada el 13 de de agosto en el sitio Politico calificó a su sobrino de "hipócrita sobre inmigración".
"He observado con consternación y horror cada vez mayores que mi sobrino, que es un hombre educado y muy consciente de su herencia, se haya convertido en el arquitecto de las políticas de inmigración que repudian la base misma de la vida de nuestra familia en este país", dijo en aquel texto Glosser, cuya hermana es la madre de Miller.
Tras las numerosas peticiones de renuncia, el subsecretario de prensa de la Casa Blanca, Hogan Gidley, citado por Yahoo News, declaró: "El Sr. Miller condena el racismo y el fanatismo en todas sus formas, mientras que quienes lo difaman tratan de negar su identidad judía, que es una forma perniciosa de antisemitismo; esta vergonzosa difamación deshonra los recuerdos de las víctimas judías de la persecución antisemita en todo el mundo".