La subida del precio de la tortilla en México enfrenta al gobierno de Peña Nieto con los productores
CIUDAD DE MÉXICO.- La tortilla de maíz, un icono de la cocina y base de la dieta de los mexicanos, aumentó sus precios casi un 7% en 2017 como consecuencia del incremento de los costos en la gasolina, el gas y la energía eléctrica. Y los productores creen que en 2018 debería aumentar todavía más para poder cubrir costos. Esto ha generado un enfrentamiento entre los productores y el gobierno, que asegura que el alza no está justificada.
En la primera semana de 2018 el precio de la tortilla ya aumentó de 12 pesos ($0.65) que costaba en 2017 a 15 ($0.72) y 19 pesos ($0.98) por kilogramo, dependiendo de la región del país donde se venda.
La subida tomó a los consumidores por sorpresa, en especial en zonas de alta marginación como la delegación Iztapalapa, en el oriente de la Ciudad de México. María Santillán, quien vive en esa zona, estaba acostumbrada a pagar hasta 13 pesos por el kilogramo de tortilla y desde este martes en dos tortillerías cercanas su precio aumentó a 15 pesos por kilo.
"Hay molestia de la gente aquí, porque en esta parte de la ciudad las familias son numerosas, los salarios son muy bajos y ni siquiera dan un aviso. Aunque por ahora el aumento es de dos pesos, impacta mucho, sobretodo en familias tan numerosas. Aquí muchas familias tienen al menos siete integrantes, por lo que deben comprar mínimo dos kilos de tortilla diario", detalla María, quien vive en Iztapalapa desde hace más de 15 años.
De enero a noviembre de 2017 el precio de la tortilla acumuló un aumento del 6.83 por ciento, superando ligeramente a la inflación general que es de 6.63%. De acuerdo con cifras del Consejo Regulador de la Masa, el consumo de tortilla por persona en el país es de aproximadamente 90 kilogramos de tortilla al año.
Lorenzo Mejía Morales, presidente de la Unión Nacional de la Industria de Molinos y Tortillas —que reúne a más de 80,000 tortillerías y molinos—, dijo que en diciembre comenzaron a aplicar nuevos aumentos, que solicitaron subsidios al gobierno en electricidad pero no los recibieron y ahora es necesario aplicar un incremento mayor para cubrir los costos de producción.
Al inicio de 2018, el precio de las gasolinas Magna, y diésel tendrá un incremento de 6.9 por ciento, según calculó la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas). Por su parte, el precio de la luz de uso comercial aumentó entre 2.6 y 3.5%.
El gobierno: la gasolina sube pero el maíz, no
La Secretaría de Economía (SE) respondió en un comunicado que el precio de la tortilla se fue ajustando durante todo el 2017, y que la declaración del líder molinero “carece de fundamento”, pues el precio de la tonelada de maíz blanco al inicio de 2018 está 11 % por debajo de su precio hace un año, siendo éste el principal componente del costo de un kilo de tortilla.
“Hacer una declaración anticipada de un ajuste coordinado de precios en cualquier sector de la economía es una violación flagrante a las leyes de competencia económica”, explicó la dependencia, quien señaló a la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) como vigilante en caso de cualquier aumento arbitrario. La SE dijo que las declaraciones de líderes del sector pueden llegar a constituir prácticas monopólicas, al tratarse de acuerdos entre competidores, con el objetivo de manipular los precios.
El investigador de la Universidad Autónoma Chapingo Gerardo Noriega coincide con que en años recientes la tonelada de maíz blanco se ha mantenido estable y no sobrepasa 3,800 pesos. Sin embargo, dijo que es responsabilidad del Estado mexicano impulsar una política de mejores precios para los productos agrícolas que evite el impacto del aumento del costo de la energía eléctrica y gas en productos como la tortilla.
Por su parte, Juan Pablo Rojas Pérez, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México, aseguró que el maíz blanco nacional se ha mantenido en el mismo rango, pero muchos productores emplean el amarillo importado.
