A cuatro años de la matanza en Parkland, reportan récord de tiroteos en escuelas de EEUU
Hace cuatro años, un exalumno asesinó a 17 personas, entre estudiantes y profesores. Como siempre, al dolor y la indignación siguió la exigencias para que esos eventos no se repitan y hasta los jóvenes de la secundaria lanzaron un movimiento por el control de armas.
Pero la situación no ha mejorado para los estudiantes en Estados Unidos. La organización Everytown For Gun Safety, que registra los tiroteos en el país, asegura que este año escolar lleva un récord histórico.
Entre el 1 de agosto y el 31 de diciembre de 2021, ocurrieron al menos 136 incidentes con armas de fuego en escuelas: suman 26 fallecidos y 96 heridos. Se trata del periodo en el que más estudiantes han sido víctimas de tiroteos desde que la organización comenzó a llevar registro en 2013.
Aseguran que tres de cada cuatro agresores toman el arma de su propia casa.
Para las víctimas de Parkland, que los estudiantes sigan siendo víctimas de las armas es impensable. "Han pasado cuatro años desde ese día que me cambió la vida y no hay momento en que no recuerde lo que pasó", dijo a la organización Sari Kaufman, una de las sobrevivientes de esta masacre ocurrida en 2018.
"Cada tiroteo, cada cierre de escuela cada noticia de un nuevo tiroteo en una escuela me abre las heridas de mi propia experiencia. Con frecuencia, los legisladores ven el dolor y el trauma en los sobrevivientes y no hacen nada. Ni los pensamientos, ni los rezos, ni los mensajes en redes sociales van a solucionar el problema. Necesitamos acción", aseguró.
Shannon Watts, fundadora de la organización Moms Demand Action, asegura que sin medidas concretas desde ningún nivel de gobierno "más comunidades serán traumatizadas y más niños pasarán sus días preocupándose por la violencia de las armas en lugar de por sus clases".
A principios de este año escolar, Everytown dio algunas recomendaciones al gobierno de Joe Biden para frenar la violencia. Entre ellas, que ordenara al Departamento de Educación levantar una estrategia de presión para que los padres guarden sus armas de forma segura; y al de Justicia para que reforzara las leyes de manera que los estudiantes menores de edad no pudieran comprar armas.
Lo que ha hecho el gobierno para controlar las armas de fuego
Este lunes, Biden aseguró que está del lado de los activistas para el control en el uso de las armas de fuego. En un comunicado citado por la agencia AP, el mandatario urgió al país a asumir su "solemne obligación" para poder "mantenernos a salvo unos a otros".
Hasta el momento, Biden ha tomado fuertes medidas para frenar la producción de armas fantasmas, que son hechas en casa y no tienen seriales para rastrearlas y que se compran sin siquiera haber cumplido con un chequeo de antecedentes criminales. Además ha pedido a las ciudades que utilicen el dinero que les fue asignado para la pandemia en ayudar en esta carrera contra las armas de fuego.
El presidente ha asegurado haber pedido a del Congreso que aprueben una legislación que exija la realización de chequeos de antecedentes antes de poder comprar cualquier arma de fuego; ha pedido que se prohíban los rifles de asalto y los cargadores de gran capacidad.
Sin embargo, estos esfuerzos no generan mayores cambios.
El Centro Nacional de Evaluación de Amenazas del Servicio Secreto hizo una evaluación de los ataques en escuelas del país entre 2006 y 2018. Concluyó que la mayoría de los atacantes fue víctima de bully en algún momento de sus vidas y que los signos de alarma estuvieron presentes antes de cualquier ataque. Entre ellos, 94% había hablado de sus planes, ya fuera de forma oral o electrónica; 75% fueron detectados porque dieron a conocer lo que harían. De ellos, 35% fueron frustrados dos días antes de que atacaran.
A la misma conclusión llegó el Instituto Nacional de Justicia en un reporte que publicó el 3 de febrero pasado, luego de analizar a 172 atacantes de tiroteos cometidos entre 1966 y 2019: los agresores fueron personas afectadas por un trauma personal que vivieron antes de cometer las matanzas. "Casi siempre estaban en un estado de crisis para ese momento y, en la mayoría de los casos, filtraron sus planes antes de abrir fuego", se lee en el reporte.
El Instituto concluyó que 16 de los 20 tiroteos más mortales en la historia moderna de Estados Unidos ocurrieron entre 1999 y 2019. Y ocho de ellos ocurrieron entre 2014 y 2019. Aseguran que el saldo de fallecidos creció de forma exponencial en la última década de su análisis: entre 2010 y 2019 murieron en promedio 51 personas por año como consecuencia de los tiroteos.