No desprecies ese centavo al fondo de tu billetera: si es de cobre podrías ganar una fortuna de hasta $282,000
Cuando el cobre se convirtió en un material vital para construir municiones y armas durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos dejó de fabricar centavos con este metal y empezaron a utilizar acero recubierto de zinc para hacer las monedas.
Sin embargo, en el tiempo que pasó entre la toma de decisión y el cambio de prensas de las máquinas durante 1943, se alcanzaron todavía a fabricar con cobre 40 piezas de un centavo con la imagen del presidente Lincoln, de acuerdo con la Casa de la Moneda de Estados Unidos.
Esta particularidad ha hecho de estas pequeñas monedas, piezas muy valoradas por la rareza que implica toparse con una de ellas.
En 2017, cuando se pudo verificar que uno de estos centavos era auténtico, se vendió por 282,000 dólares en una subasta realizada en Denver, Colorado, de acuerdo con 12 News.
Debido a este contexto, muchos falsificadores han puesto sus manos a la obra para tratar de engañar con centavos hechos durante otros años, a los que modifican de varias formas para intentar hacerse de una buena suma de dinero.
Entre las maneras más habituales de engaño están las modificaciones en los años de creación impresos en las monedas e incluso revisten a los centavos con cobre.
Para saber si una persona tiene en sus manos una de las 40 valiosas piezas, la Casa de la Moneda de EEUU recomienda utilizar un imán: si el centavo se pega, es falsa; pero si se queda quieta sin moverse, hay probabilidades de que pueda acceder a una buena cantidad de dinero.
Así que, antes de despreciar a esas pequeñas monedas que mucha gente cree que solo ocupan espacio, es recomendable analizar cada una de ellas para saber si ese centavo en el fondo de la billetera puede cambiarle la vida a alguien.
La Casa de la Moneda recomienda a todos los que crean tener uno de estos peculiares centavos en esa jarra en la que van ahorrando dinero, acercarse a un experto que pueda ayudar a corroborar su veracidad.